Gasteiz - Dislebi, la Asociación de Dislexia de Euskadi, reivindicó ayer en el Parlamento Vasco la necesidad de que se hagan en los centros escolares pruebas para la detección precoz de la dislexia desde los 4 años, como medida para atajar las dificultades con las que se encuentra este alumnado.

La presidenta de Dislebi, Julia Abad, y su vicepresidenta, Isabel Molina, comparecieron en la Comisión de Educación para trasladar a los grupos la realidad de este colectivo, entre un 5 y un 10% de la población, y pedir que la futura Ley Vasca de Educación recoja medidas para garantizar la igualdad de oportunidades de este alumnado. En ese sentido, Molina recordó que “aquellos casos que se detectan pronto y con una intervención adecuada van a tener un mejor desarrollo”, ya que existen test que permiten descubrir desde los 4 años, antes del inicio en el aprendizaje de la lectoescritura, las dificultades que padecen estos niños.

Actualmente, lo habitual es que el diagnóstico de la dislexia se realice en torno a los 8 años, lo que agrava las dificultades de aprendizaje “a lo largo de toda su trayectoria escolar”. La vicepresidenta del Dislebi recordó el origen neurobiológico de la dislexia, “que genera problemas tanto para leer como para escribir a lo largo de toda la vida”, ya que esa dificultad para identificar las palabras de forma precisa surge en grupos de neuronas que se encuentran en una zona del cerebro que no les corresponde. Molina recordó que las consecuencias de padecer una dislexia no diagnosticada llevan al 70% de los niños que la sufren a tener baja autoestima. - Efe