Madrid - El Departamento de Salud del Gobierno vasco confirmó ayer un segundo caso de un bebé lactante afectado por salmonela y que había consumido leche maternizada elaborada por el grupo francés Lactalis. En un escueto comunicado, el Departamento de Salud informaba de que el bebé fue atendido en el Hospital Universitario Basurto y describía que “su estado de salud es bueno, no se encuentra hospitalizado y está bajo control y seguimiento médico”.

La confirmación de la infección por salmonela ha sido comunicada al Departamento dirigido por Jon Darpón desde el Instituto de Salud Carlos III de Majadahonda (Madrid). Se trata del segundo caso de un bebé afectado por la leche francesa contaminada por salmonela, después de que el pasado 12 de diciembre se diera a conocer el caso de otro bebé que también fue atendido en un centro hospitalario vizcaino; en este caso en el Hospital de Cruces.

Fue la propia compañía Lactalis la que, en un comunicado, confirmó que este caso estaba “relacionado con el mismo tipo de cepa de los casos aparecidos en Francia” vinculados al consumo de su leche infantil, por lo que ofreció sus disculpas. El pasado 12 de diciembre, tras la alerta remitida por parte del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad a todas las comunidades y siguiendo el procedimiento habitual en estos casos, se procedió a la inmovilización de la leche maternizada fabricada por el grupo francés.

Lactalis anunció el pasado 18 de enero la retirada del mercado estatal de todos los productos de 37 de sus referencias bajo las marcas de alimentación infantil Sanutri, Damira y Puleva Bebé que habían sido producidos en su fábrica de Craon (Francia), tras la aparición de varios casos de salmonela. Se trata de leche en polvo de Damira, Sanutri y Puleva Bebé, así como de papillas de la marca Puleva Bebé, leche en polvo para metabolopatías de Taranis Nophenyl y de un módulo de nutrición de Matodextridine. Desde el Departamento de Salud del Gobierno vasco y desde Osakidetza subrayaban que mantienen una vigilancia epidemiológica “activa y exhaustiva” de todos los casos sospechosos que puedan presentarse.

Y desde 2005 Y es que este escándalo sanitario está manteniendo en vilo a las autoridades. Sobre todo, después de que hace unos días el propio presidente del grupo lácteo francés, Emmanuel Besnier, reconociera que esos productos infectados podrían llevar en el mercado desde 2005. Ese año, precisamente, se detectó un caso de salmonela en la torre de secado de la planta de Craon, lugar donde volvió a reproducirse en 2017. La bacteria detectada en la actualidad “es la misma” que la de 2005, cuando Lactalis no era la propietaria de la planta de Craon. Por ello, no descartó que la bacteria estuviera diseminada por las instalaciones desde 2005: “no se puede excluir que bebés hayan consumido leche contaminada” desde entonces.

Ante esta situación, además de la retirada del mercado de todos los productos de esas marcas (más de medio millón en el Estado español), desde el Grupo Lactalis ya indicaron hace un tiempo su intención de cerrar la torre de secado contaminada “por temor a una recaída dadas las alertas de 2005 y 2017”. Además, reforzarán los programas de control de la leche infantil, según expresó su presidente quien, no obstante, se mostró sorprendido ante el hecho de que ninguno de las 16.000 pruebas y análisis realizados el año pasado dieran positivo e hiciera saltar las alarmas. - DEIA/E.P./Efe