Madrid - La Fundación Oír es Clave ha alertado de que muchos de los juguetes que protagonizan los regalos de estas fechas emiten sonidos que pueden superar los 80 decibelios (dB), lo que podría ocasionar lesiones irreversibles en la audición de los niños.
En un comunicado, la Asociación Alexander Graham Bell para Sordos e Hipoacúsicos y la Fundación Oír es Clave piden a los padres que escuchen los sonidos que emiten los juguetes antes de comprarlos, ya que si éste es demasiado alto para el adulto, también lo es para el niño y aconsejan el uso de aplicaciones móviles de sonómetros. Recuerdan que la pérdida de audición por ruido es acumulativa de manera gradual a lo largo de los años y advierten de que a mayor exposición y menor distancia de uso, los límites permitidos son más reducidos.
Así, un juguete destinado a estar cerca de la oreja como puede ser un teléfono móvil de juguete, tendrá unos valores límite inferiores a los de un juguete del que va tirando el niño con una cuerda. También piden que se controle el uso que el niño hace del juguete y que cuando éste se use de modo inadecuado, generando un riesgo para el menor, se corrija. Por ejemplo, si el niño coloca un juguete durante largos periodos de tiempo cerca de la oreja o lo utiliza para producir ruidos de alto nivel acústico, debería evitarse dicha práctica. Asimismo, recomiendan que los juguetes que producen niveles de sonido elevados no se utilicen cerca del oído o en lugares cerrados.
Donación Por otra parte, el Instituto Vasco de Consumo, Kontsumobide, donó ayer a la Cruz Roja, los juguetes adquiridos para realizar sus campañas de inspección. La directora del organismo autónomo dependiente del Departamento de Turismo, Comercio y Consumo, Nora Abete, hizo entrega de los juguetes en Bilbao al representante de la Cruz Roja, entidad que trabaja con familias desfavorecidas.
El Instituto Vasco de Consumo efectúa periódicamente, a través de la Unidad de Inspección y Control de Mercado, diferentes campañas para determinar si los productos y los servicios puestos a disposición de las personas consumidoras de Euskadi cumplen los requisitos de seguridad, información y etiquetado impuestos por normativa vigente. Según recordó Abete, Kontsumobide tiene entre sus objetivos el de “fomentar el consumo responsable y solidario” por lo que, con este gesto, pretende contribuir “a que los menores con menos recursos puedan disfrutar también de las Navidades”.
Además, insistió en que Kontsumobide “no solo debe promover a través de sus actividades formativas e informativas un consumo responsable y solidario”, sino también “dar ejemplo con su propia actuación”. “Como organismo público debemos dar pasos concretos y ayudar a cambiar la forma de pensar de nuestra sociedad. Es la primera vez que el instituto entrega estos juguetes, comprados para realizar las campañas de inspección, y no será última”, señaló. - Efe/Europa Press