Bilbao - El paracetamol efervescente produce un significativo aumento de la presión arterial, según constata un ensayo clínico realizado en centros de salud del País Vasco y de Cataluña, elaborado por el Instituto Universitario de Investigación en Atención Primaria Jordi Gol. En este caso, el problema radica en que se trata de comprimidos efervescentes ya que los excipientes de esta formulación de fármacos aportan una cantidad importante de sodio para facilitar su disolución. Hay que señalar que una dosis de un gramo de paracetamol en pastilla efervescente contiene alrededor de 376 y 567 mg de sodio.
Miren Morillas, cardióloga de la Unidad de Rehabilitación Cardiaca del Hospital de Galdakao, constata el riesgo. “El problema son los preparados efervescentes por el sodio. A un hipertenso que le estás recomendando que restrinja el consumo de sal, no le puedes dar ese extra de sodio”, afirma. Morillas aclara que una persona normal debe consumir 5 ó 6 gramos de sal al día y un hipertenso no debe tomar más de 2,5 gramos. “Eso, por el lado del paracetamol -explica la cardióloga-, pero luego hay antiinflamatorios, tipo ibuprofeno, que tienen un efecto vasoconstrictor renal que acaba promoviendo la retención de líquidos y muchos hipertensos se descompensan con la toma de antiinflamatorios”, destaca.
A su juicio, “la toma puntual de un paracetamol efervescente o de un ibuprofeno no tiene ningún efecto secundario para nadie, ni para un hipertenso ni para un paciente con insuficiencia cardiaca, el inconveniente es que se ha generalizado mucho el uso de estos fármacos y hay mucha gente que los toma casi a diario porque le duele la espalda, la rodilla etc... y al final se recurre a ellos de manera constante”.
La cantidad es crucial a la hora de reducir los riesgos. Las dosis diarias máximas de aspirina efervescente e ibuprofeno soluble también hacen que se superen los niveles de sodio recomendados. “Desde luego, nosotros a los pacientes coronarios les recomendamos que no tomen antiinflamatorios ni este tipo de analgésicos y si son necesarios, deben tomarlos en comprimidos aunque resulten más incómodos”, afirma. “Porque la toma crónica de estos preparados se relaciona con el número de eventos coronarios”, subraya.
El estudio que revela los riesgos del paracetamol efervescente se realizó sobre 49 paciente hipertensos, mayores de 18 años, con una presión arterial ambulatoria de 140 y 90, y con tratamiento antihipertensivo estable.
A los pacientes estudiados se les dividió en dos grupos. A los del primero se les administró un gramo de paracetamol efervescente cada ocho horas durante tres semanas, mientras que el segundo grupo tomaba comprimidos no efervescentes. Y es que dado el uso común de estos medicamentos en los hogares, y para quienes tienen problemas cardiovasculares, un ligero aumento en las cifras de presión arterial es, en muchos casos, un agravante.
Desde el instituto Jordi Gol se destaca que las presiones arteriales al principio de cada período no mostraban diferencias entre grupos, pero al final del tratamiento los pacientes con paracetamol efervescente presentaron una presión arterial superior respecto a las presiones arteriales del principio del estudio y los pacientes tratados con el medicamento en comprimidos.