MADRID. La delegada madrileña de Urbanismo, Paz González, insistió ayer que el Madrid Arena, en el que murieron cuatro jóvenes en una avalancha durante una fiesta en la noche de Halloween, cumple la normativa de seguridad vigente cuando se construyó, en 2001, que es lo que dice la ley. La delegada de Urbanismo precisó que al no haberse producido un cambio de licencia ni de uso no era necesario aplicar los criterios estipulados en las legislaciones que se aprobaron con posterioridad. Insistió en que el edificio "cumple con todas las prescripciones técnicas en materia de emergencias, protección, seguridad y antiincendios" que contenía el Código Técnico de la Edificación vigente cuando se construyó hace 11 años.
González indicó que si la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos, titular del Madrid Arena, hubiera vendido finalmente el edificio, como se planteó hacer en 2010, el inmueble sí tendría que haberse adaptado a la normativa vigente en ese momento. La razón es que entonces sus nuevos propietarios sí habrían tenido que solicitar una licencia de urbanismo, que en 2001 no fue necesaria porque el promotor era una administración pública, en este caso el ayuntamiento. Cuando Madrid Espacios y Congresos se planteó en 2010 vender el edificio elevó a Urbanismo una consulta que motivó un informe en el que se detallaban una serie de incumplimientos de la normativa de seguridad vigente entonces, que un propietario privado sí hubiera tenido que cumplir.
Lo cierto es que la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos, gestora del recinto, y cuyo presidente es ahora el edil de Economía, Pedro Calvo, inició en noviembre de 2009 un procedimiento para obtener licencia ante el área municipal de Urbanismo. Pocos meses después desistió, ante las objeciones presentadas por la dirección general de Ejecución y Control de la Edificación, dependiente de Urbanismo, que detectó una larga serie de gravísimas deficiencias que comprometían la seguridad e impedían que pudiera obtener dicha licencia. Entre ellas, que los pasillos para salir de la pista a la calle, donde murieron las cuatro jóvenes aplastadas por un agolpamiento súbito de gente, eran insuficientes. Pese a ello, el Madrid Arena siguió funcionando.
funeral en alcalá Mientras, familiares y amigos acudieron ayer por la mañana al funeral de Belén Langdon, la cuarta víctima de la avalancha. La multitudinaria celebración ha sido oficiada por el obispo Juan Antonio Reig Pla en la Catedral de Alcalá de Henares. Una amiga de la madre, Patricia de Don Esteve, quiso ante los medios de comunicación el carácter de la homilía, donde se ha respirado "una serenidad muy grande", alejándose de los grandes lamentos y reconfortándose en el pensamiento católico, destacando que Belén "ya está en el cielo" y la "habrá recibido Dios". >ep/efe