El niño que nació el pasado miércoles en una oficina de empleo de la localidad madrileña de Alcorcón se llamará Inem, en recuerdo del lugar en el que vino al mundo inesperadamente, entre las personas que hacían cola en demanda de un trabajo. La madre del bebé, una nigeriana llamada Clarice, explicó que ha decidido ponerle dicho nombre "para que se acuerde de dónde ha nacido" y asistido por una médico psiquiatra.