Donostia. El Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK) nombró a su director general, Antton Lete, el mismo día en el que adjudicó definitivamente una obra a la empresa de este, Altair. Ese 30 de marzo, el consejo de administración aprobó encomendar la asistencia técnica y la dirección de los movimientos de tierras de la planta de compostaje de Bergara a la ingeniería donostiarra por valor de 35.640 euros.

Pero no es la única actuación que se le ha adjudicado a Altair, ya que el mes anterior, el 16 de febrero, el ente supramunicipal también le encargó la auditoría de las obras de movimiento de tierras de Arzabaleta (Zubieta). En este caso, el presupuesto fue de 17.876 euros.

Ambas actuaciones fueron adjudicadas provisionalmente el 16 de febrero, pero, debido a unos problemas técnicos, la obra de Bergara no pudo recibir el visto bueno definitivo hasta el 30 de marzo, el mismo día en el que Lete fue nombrado director general del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa por el consejo de administración que preside el diputado foral de Medio Ambiente, Juan Carlos Alduntzin.

Tanto el diputado como el otro administrador de Altair aseguran que Lete dejó la compañía antes de acceder a su nuevo puesto del Consorcio, pero, a día 3 de mayo, su nombre seguía figurando como uno de los dos administradores solidarios de la ingeniería, tal y como se desprende de la documentación del Registro Mercantil que obra en poder de este diario.

objeto social Los mismos documentos indican que una semana antes de que Lete fuera nombrado director general, Altair amplió su objeto social y modificó el artículo estatutario. Así, Altair Ingeniería S. L. pasaría a prestar "servicios, contratación y ejecución de trabajos de ingeniería, arquitectura, consultoría, auditoría, asesoramiento profesional, así como la investigación y desarrollo de productos y servicios relacionados".

Hasta entonces la compañía solo desarrollaba y creaba proyectos y productos de ingeniería industrial, pero nunca prestaba servicios, como se le ha requerido ahora por parte del Consorcio de Residuos. La empresa podrá ofrecer dichos servicios tanto directa como indirectamente, mediante la participación en terceras sociedades.

Cabe mencionar que la empresa de Lete fue constituida en 1996 por varios socios fundadores y, durante el primer año, el actual director de GHK ostentó el cargo de administrador único de la sociedad. El año 1997 pasó a ser uno de los dos administradores solidarios de Altair, cargo que siguió ocupando simultáneamente con la dirección del Consorcio de Residuos, al menos, hasta el 3 de mayo, según consta en el Registro Mercantil de Gipuzkoa.

nueva empresa Cuatro días más tarde de acceder a la dirección general del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa, Antton Lete constituyó una sociedad mercantil llamada Eppur Zero Waste Solutions en la que figura como socio único. Esta nueva sociedad, que tiene su sede ubicada en el portal de al lado de Altair, presta "servicios de asesoría, ingeniería, consultoría, planificación, I+D+i y otros trabajos complementarios en materia de recogida, gestión, valorización, comercialización y tratamiento de residuos", tal y como se indica en sus estatutos.