Cada año los gobiernos europeos están obligados a remitir a la Comisión Europea un informe antes del 1 de mayo con los esfuerzos realizados en el ejercicio precedente para poner coto a la sobrecapacidad de sus respectivas flotas pesqueras. Sin embargo, a juicio de Bruselas, el Gobierno español no ha ofrecido la información necesaria para evaluar si la capacidad de la flota española se ajusta a los recursos pesqueros disponibles.

"No han aplicado las orientaciones y no han remitido ninguna evaluación sobre la capacidad de la flota", critica la Comisión en su último informe relativo al año 2009 publicado recientemente y que sitúa al Estado español entre los países con más deficiencias en su cooperación con el Ejecutivo comunitario.

La Dirección General de pesca que lidera la griega María Damanaki confirmaba que sigue existiendo en la Unión Europea una flota sobredimensionada, que la reducción media en 2009 fue de entre el 2 y 3% y que a este ritmo, que se ve compensado parcialmente por los progresos tecnológicos de los que también se beneficia el sector pesquero, "será difícil eliminar a corto plazo la sobrecapacidad si no hay cambios en la política actual". Y es que entre 2003 y 2009 la capacidad se redujo un 16% en términos de potencia en el caso de los antiguos quince Estados miembros y un 31% en los diez países de la ampliación.

En el caso de España, el informe publicado hace pocas jornadas admite que se continuaron desguazando barcos con ayudas públicas. En concreto, fueron 66 los navíos, con 4.949 toneladas, que terminaron su vida útil aunque se sumaron otros 85 con un tonelaje bruto de 1.000 toneladas. El Gobierno español no es el único que recibe la crítica de Bruselas aunque sí el que peor nota saca en el ranking de cooperación realizado por los técnicos pesqueros. Y es que en su caso el informe advierte que las autoridades españolas ni describieron la capacidad de la flota en relación a los recursos asignados, ni remitieron información sobre las debilidades y fortalezas del sistema de gestión pesquero ni ofrecieron datos sobre la evolución de la flota o su relación con las distintas pesquerías de interés para España.

En un documento paralelo también publicado en fechas recientes la Comisión Europea reconoce que el declive económico del sector es importante. Si bien la flota comunitaria logró beneficios de 250 millones de euros en 2008 -el 6% de los ingresos totales- el análisis muestra que el valor añadido generado por el sector cayó un 23% respecto a 2007 y que entre período 2002-2008 los segmentos analizados registraron pérdidas de entre el 30 y 40%. Entre las causas de estos pobres resultados apuntan a la evolución de las pesquerías, al impacto de los precios del petróleo, la existencia de una sobredimensión de la flota y a los precios de la pesca.

Lo mismo que en el documento sobre los esfuerzos para reducir la flota, la Comisión Europea también critica al Gobierno español por remitir solo datos parciales anteriores a 2007 y no resolver las inconsistencias entre la información disponible por los técnicos europeos y los escasos datos aportados por las autoridades españolas que ni remitieron información sobre esfuerzos pesquero, precios o descargas relativos a las campañas anteriores a 2007 ni información sobre capacidad empleo, beneficios del sector, esfuerzo o descargas correspondientes a 2008. La Comisión Europea aprovechó la presentación ayer de los dos documentos para hacer un llamamiento a la cooperación de todos los Estados miembros.