Muere un montañero navarro al accidentarse en el valle de Aspe

IRUÑEA. La montaña volvió a llevarse ayer para siempre la vida de un montañero navarro. La Marère (2.221 metros) se convirtió ayer en la inesperada tumba de Jokin Buldain Urdiroz, de 46 años y vecino de Burlada, que sufrió un desgraciado accidente cuando ascendía este monte francés, enclavado en el valle de Aspe, en los Pirineos Atlánticos.

El experimentado montañero sufrió una caída cuando se encontraba a una altura de unos 1000-1.300 metros, en compañía de otro deportista pamplonés y muy amigo suyo, Alfredo San Miguel Muñoz, de 34 años. Fue esta persona quien alertó del suceso en torno a las 13.30 horas a través de una llamada telefónica que realizó a su esposa, a la que pudo facilitar las coordenadas precisas del lugar dado que ambos portaban un dispositivo de geolocalización GPS.

El monte La Marère se localiza en el término municipal de Etsaut, en el departamento francés de Aquitania. También denominado Pic de l"Embarrère, esta escarpada cima domina el Col de Iseye (1.829 metros) y constituye uno de los mejores miradores del macizo de Sesques. Al igual que el cercano Bergon (2.148 metros), los itinerarios de acceso a la cima son largos y presentan algunas pequeñas dificultades, por lo que es una cima poco ascendida. Al parecer, ambos montañeros navarros se encontraban superando la arista de un cañón, cuando Jokin Buldain sufrió un desafortunado resbalón. Su acompañante, que resultó ileso, utilizó entonces su teléfono móvil para alertar de lo ocurrido a su mujer, que se puso en contacto con SOS Navarra y les indicó su localización, aunque sin conocer la suerte que había corrido el otro montañero.

Con la información suministrada por esta persona, la Agencia Navarra de Emergencias trasladó la alerta a la Gendarmería francesa, que movilizó un helicóptero de Protección Civil con dos integrantes del Pelotón de Montaña de Olorón y un médico, para realizar las primeras atenciones en el lugar del suceso. El equipo de rescate localizó al accidentado y comprobó que había fallecido, por lo que procedió a la recuperación del cadáver en una zona que se encontraba parcialmente nevada. Los restos mortales de Jokin Buldain fueron trasladados entonces hasta el depósito mortuorio de Olorón para que le fuera efectuada la autopsia.