barcelona. Al menos una adolescente muerta y otras tres, también menores de edad, resultado heridas de diversa consideración, una de ellas en estado crítico, en el accidente que se produjo ayer tarde en el parque de atracciones del Tibidabo, en Barcelona, según informó un portavoz del Servicio de Emergencias Médicas (SEM). Los cuatro menores se encontraban en la atracción El péndulo cuando un brazo articulado de ésta ha caído, hacia las 19.10 horas de ayer, sobre otra atracción, denominada Mina de oro, causando la muerte de una joven y heridas de diversa consideración a otros tres menores. Las mismas fuentes precisaron que una de las menores, de 15 años, se encuentra en estado crítico y tuvo que ser atendida en el mismo lugar de los hechos, mientras otra de las jóvenes, también de la misma edad, sufrieron un traumatismo craneoencefálico. Ambas fueron trasladada al hospital Sant Joan de Déu de Esplugues de Llobregat (Barcelona).
El tercer herido sería un niño al que unos familiares trasladaron, al parecer, al Hospital General de Cataluña, por lo que de momento se desconoce su estado de salud, según indicó el portavoz del SEM.
Unas 4.000 personas se encontraban en el en el parque de atracciones del Tibidabo cuando sucedió el trágico accidente. El brazo articulado que se ha roto pesa 25 toneladas y eleva a los viajeros 38 metros de altura, desde donde les deja caer en caída libre a una velocidad de 100 kilómetros por hora en 2,8 segundos. El parque cerró la zona de influencia de la atracción, mientras se evacuó de forma progresiva.
brazo articulado El péndulo consta de un brazo articulado de 25 metros de longitud que sujeta una góndola con una capacidad de cuatro personas por trayecto, cabina que se deja caer de forma controlada desde una altura de 40 metros.
Los ocupantes son primero elevados para después ser soltados, hasta conseguir una velocidad de 100 kilómetros por hora en menos de 2,8 segundos, y soportar una fuerza de la gravedad de 4,5.
Un vez finalizada la fase de caída al vacío, la góndola describe un movimiento pendular de unos cincuenta metros de recorrido. Los ocupantes son primero elevados para después ser soltados, hasta conseguir una velocidad de 100 kilómetros por hora en menos de 2,8 segundos, y soportar una fuerza de la gravedad de 4,5.
El montaje de esta atracción llevó tres días de trabajo y fue llevado a cabo por cinco técnicos italianos y un ingeniero. La instalación llegó de Italia el 26 de julio de 2006 y entró en funcionamiento en agosto de ese año. Una vez finalizado el montaje se hicieron pruebas de regulación, carga y sistemas de emergencias, según informó el parque cuando se puso en marcha la atracción.
Tres meses después de su inauguración, la Asociación de Vecinos de la Cima del Tibidabo y la Plataforma cívica para la Defensa de Collserola criticaron que la llegada de El Péndulo supuso la destrucción de una zona de encinas sin que el consistorio hubiera aprobado el proyecto preceptivo.
Al menos doce personas han fallecido en accidentes ocurridos en parques de atracciones y ferias en el Estado desde 2000, ocho de ellas menores, incluyendo a la adolescente de 15 años muerta ayer.