IRUÑEA. La familia de Nagore Laffage se ha mostrado hoy "convencida" de que finalmente habrá "justicia" en el caso de su hija, de cuya muerte conmemoran el segundo aniversario a la espera de la decisión del recurso presentado ante el Tribunal Supremo contra la sentencia que condenó al autor por homicidio.
Así se ha pronunciado hoy Asun Casasola, la madre de la joven enfermera irundarra Nagore Laffage, que murió el 7 de julio de 2008 a manos del psiquiatra José Diego Yllanes, quien un año después fue juzgado por asesinato y finalmente condenado por homicidio a una pena de 12 años y medio de prisión, decisión que confirmó el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) que, tras un nuevo recurso, está pendiente de revisión por el Tribunal Supremo.
Con motivo del segundo aniversario de la muerte, la familia y los amigos de la joven han convocado una concentración para este sábado, que apoyan partidos como PSN y Nafarroa Bai (cuyos votos en el Ayuntamiento de Pamplona decidieron la personación del consistorio en el recurso ante el TS), el Instituto Navarro para la Igualdad (INAI) y otras organizaciones y colectivos feministas.
Se trata de "volver a mostrar a la sociedad que seguimos sin olvidar a Nagore" y de expresar el agradecimiento a "las instituciones y a la sociedad en general" que ha mostrado su apoyo a la causa, de forma que la familia se mantiene "firme gracias a todas estas personas" que le muestran su "cariño".
Así, Casasola ha mostrado su esperanza en poder "descansar" cuando el Tribunal Supremo (TS) decida a su favor en el recurso, al entender tanto la familia como las acusaciones particulares (en nombre de los Ayuntamientos de Pamplona y de Irún, del INAI y de las Juntas Generales de Gipuzkoa, que la muerte de Nagore no fue un homicidio sino un asesinato, ya que "existió alevosía" en los 38 golpes que recibió antes de quedar "indefensa" y ser estrangulada.
"No nos queda más remedio que mantenernos fuertes y firmes en nuestro deseo de que la pena impuesta a José Diego Yllanes sea mayor que los 12 años a los que ahora está condenado por el asesinato de mi hija", ha dicho Asun Casasola, en la "esperanza" de que las pruebas sirvan para demostrar que el autor de su muerte le arrebató la vida "con alevosía y plenamente consciente, sin estar influido ni por el alcohol ni por ninguna sustancia".
"El jurado popular me falló", ha lamentado Casasola sobre el juicio en primera instancia del caso, al que siguió el recurso desestimado por el TSJN cuya sentencia contenía un voto particular en contra de un "juez valiente" que apreciaba alevosía en los hechos, por lo que ahora del TS espera que esta agravante "se vea y al final la familia podamos descansar".
"Tiene que haber justicia", ha instado Casasola, quien ha insistido sobre Yllanes que "fue muy cobarde por no dar la cara y tiene que pagar por un asesinato".
Ha mostrado además su "solidaridad y cariño" para todas las víctimas de violencia machista, y ha subrayado que las mujeres tienen "derecho a decir no" y a "una vida sin violencia".
En cuanto a los próximos Sanfermines, ha tenido palabras de agradecimiento por el gesto de las peñas pamplonesas, que el 7 de julio portarán un lazo lila en recuerdo de Nagore y mostrarán su "compromiso" contra la violencia machista.