El debate en Catalunya, con ramificaciones en la gresca estatal, ha virado hacia el Tribunal de Cuentas por las imputaciones contra varios líderes independentistas por el uso de fondos públicos en la promoción exterior del procés. Después de que Pere Aragonès lo calificara de “inquisición económica” y un elemento más de la “represión”, instando al ministro José Luis Ábalos a cumplir su promesa de “desempedrar” el “camino de piedras” que este escenario supone de cara a un diálogo efectivo; Pedro Sánchez negó que vaya a dar instrucciones al respecto a la Abogacía del Estado porque, además, el tribunal no es, pese a su denominación, un órgano judicial sino una “instancia administrativa” que, por ahora, no ha dictado “resolución firme” y que ésta puede ser “recurrida ante los tribunales”. La responsable de Igualdad y dirigente de Unidas Podemos, Irene Montero, apostó por “eliminar todo lo que no sea eminentemente, protagónicamente, político: el diálogo y el acuerdo”, ya que “todo lo demás van a ser dificultades, piedras, en un camino que sí o sí vamos a recorrer”.

Al otro lado del arco político, el líder del PP, Pablo Casado, ve “el colmo” que Ábalos hable de “piedras en el camino” cuando el Tribunal de Cuentas “quiere hacer que se cumplan las resoluciones del Tribunal Supremo y evaluar cuánto dinero se ha malversado corruptamente por los independentistas para la agenda de ruptura con la legalidad”. Es más, ligó su renovación a la del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) lanzando una predicción: Podemos dirá que hay que desbloquear y después presentará una propuesta para elegir “a dedo” al tribunal con mayoría simple. “¿Esto qué es, esto es Venezuela? (...) Apuntamos a los jueces, a los fiscales que no obedecen directrices políticas y ahora a los miembros y vocales del Tribunal de Cuentas”, agregó Casado.

Desde el soberanismo, Junts presentará en el Congreso una proposición no de ley en la que pedirán que la Abogacía “deje de formar parte de la acusación contra las personas que están haciendo frente a la causa ante el Tribunal de Cuentas”.