Bilbao - Aunque siguen mostrándose dispuestos a arrimar el hombro para evitar las elecciones generales en noviembre, incluso poniendo sobre la mesa los seis votos que atesoran en el Congreso, el PNV ve cercana la cita con las urnas. No abunda el optimismo en Sabin Etxea de que un viraje de última hora haga saltar por los aires la maraña de la desconfianza tejida entre PSOE y Podemos. Y ayer, en la Fiesta de la Vendimia en la localidad alavesa de Mañueta, el portavoz en la Cámara baja Aitor Esteban puso nombres y apellidos a los que considera causantes de la situación. “Gran parte” de los miembros de los equipos de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias “estarían por la labor” de certificar un acuerdo, si bien existe un “problema”, insistió: las dos formaciones se ciñen a “lo que digan” sus líderes.

Así, el PNV ve complejo que un golpe de timón de última hora permita esquivar la celebración de unas elecciones el 10 de noviembre. Sabedor aún así de que negociaciones de este tipo pueden desbloquearse “en el último minuto”, Esteban cree sin embargo que no habrá ningún milagro de última hora. “Cuando uno oye a la portavoz del Gobierno español decir que espera que en unas elecciones se entendiera la postura del Gobierno socialista, que ha intentado buscar un acuerdo, en vez de decir que se va intentar hacer un gobierno, da la sensación de que ya no tienen la cabeza en buscar un acuerdo”, subrayó. Esa circunstancia, además, se da en un Estado español en el que “el diálogo político no se entiende. Y no se practica. Y me temo que falta todavía mucho tiempo para que lleguemos a ese punto”. “Afortunadamente”, el portavoz en el Congreso contrapuso que Euskadi, más acostumbrada a la cultura el pacto entre diferentes, se erige en una isla. “La situación en Euskadi es diferente”, resumió.

Esteban achaca la responsabilidad del bloqueo a los líderes del PSOE y Unidas Podemos. “Esto ya es un problema de liderazgo y de líderes”, remarcó. Ni el presidente en funciones, Pedro Sánchez, ni el dirigente morado, Pablo Iglesias, han sido capaces de desatascar unas negociaciones llenas de recelos mutuos y los jeltzales ven pocas esperanzas a apenas unas horas de que Felipe VI emprenda la ronda de contactos con los partidos. Aunque podría haber un haz de luz al final del túnel, siempre que Iglesias y Sánchez “reflexionen” ante un escenario tan complicado. Por el PNV no será, ya que Esteban aseveró que seguirán colaborando para orillar un cuarto paso por unas elecciones generales en apenas cuatro años. “Si nuestros votos son necesarios para lograr un gobierno, ahí estarán. Trabajaremos hasta el último intento para que el acuerdo fructifique”, afirmó.

¿Gran Coalición? Tan compleja es la situación política en el Estado que ha habido quien ha deslizado la idea de que PSOE y PP unan fuerzas en una gran coalición, aunque el presidente popular Pablo Casado desechara desde el primer minuto cualquier opción de dar oxígeno a los socialistas. No lanzó la propuesta un representante político cualquiera, sino el presidente y líder del Partido Popular en Galicia, Alberto Núñez Feijóo. Esteban, por el contrario, no ve ni siquiera de forma remota que pueda cristalizar una opción de esas proporciones, inédita además en el Estado.

De hecho, Esteban rememoró que Sánchez lanzó ciertos guiños al PP e incluso a Ciudadanos, para que una abstención le facilitara el camino. No fructificó. Menos posibilidades habría ahora, a su juicio, habida cuenta de que PSOE y Unidas Podemos, “que ideológicamente no deberían estar tan distantes”, no han sido capaces de aliarse. Por ello, el portavoz jeltzale cree que una colaboración entre PSOE y PP sería un movimiento político “aún más complicado”. - I. Fradua