Edimburgo - La primera ministra británica en funciones, Theresa May, instó ayer a su sucesor a fijar como prioridad de su futura gestión mantener la unidad del Reino Unido, en un momento en que la perspectiva de un Brexit sin acuerdo ha encendido el debate sobre la independencia de Escocia. “Confío en que quien me suceda en el número 10 de Downing Street hará de la Unión (el Reino Unido) su prioridad. Él se basará en el trabajo realizado durante los últimos tres años, en los cuales el fortalecimiento de la Unión se ha convertido en una prioridad explícita del Gobierno”, afirmó la conservadora May.

La jefa del Ejecutivo británico visitó Escocia, por última vez antes de dejar el cargo, y eligió la ciudad de Stirling, al noreste de Edimburgo, para emplazar a los aspirantes a sucederla, el exministro de Exteriores Boris Johnson y el actual titular de esta cartera, Jeremy Hunt, a “gobernar en nombre de todo el Reino Unido”.

Su visita se produce en la víspera del encuentro que Johnson y Hunt mantendrán hoy en la ciudad escocesa de Perth, que se enmarca dentro de la serie de mítines en que ambos participan para conseguir el voto de los afiliados conservadores.

El día 23 Los 160.000 miembros del partido empezarán en los próximos días a emitir sus votos y el 23 de julio será cuando se conozca el nombre del ganador, que al día siguiente relevará a May al frente de la formación y en la jefatura del Gobierno, tan solo un día antes de que el Parlamento británico inicie su receso veraniego. Ambos candidatos se muestran decididos a materializar el Brexit en la fecha prevista (el 31 de octubre) y han asegurado que están dispuestos a cumplir con esta promesa incluso si no hay un acuerdo que regule la salida, una postura que ha encendido los ánimos en Escocia.

Con motivo de la visita de May, la ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, advirtió de que Escocia “se dirige inexorablemente hacia la independencia” como resultado del “legado” que deja la premier. “El comportamiento de los conservadores hacia Escocia en los tres años transcurridos desde la votación del Brexit ha sido injusto, arrogante y desdeñoso”, sostuvo la líder nacionalista, que recordó que la nación se opuso mayoritariamente a abandonar el club comunitario.

Sturgeon se ha comprometido a impulsar un segundo referéndum de independencia en Escocia antes de que finalice la actual legislatura en 2021, para lo que es imprescindible el acuerdo con Londres, que aduce que no está claro que los escoceses pidan otro referéndum.

Según los analistas, el abandono del club comunitario puede incrementar la base de independentistas en Escocia, especialmente si la ruptura se produce de forma abrupta, debido al sentimiento europeísta de la mayoría de escoceses y al hecho de que su economía depende en gran medida de Europa. Una encuesta reciente de YouGov indicó que el apoyo a la separación se sitúa en torno al 49% frente al 51% que la rechaza, mientras que otro sondeo de Panelbase, realizado a finales de junio, mostró que el 53% optaría por la independencia si Boris Johnson, que encabeza la contienda, es el próximo primer ministro.