MADRID. Iñarritu ha planteado al secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, Roberto Bermúdez de Castro, si no cree "de sentido común" que el CIS vuelva a preguntar por la Jefatura del Estado, algo que dejó de hacer en sus barómetros hace tres años, cuando el Rey aparecía "suspendido" con 4,34 puntos.

Ha hecho notar que en los últimos años ha habido noticias "tan significativas" como la condena al marido de la Infanta Cristina, Iñaki Urdangarin, el discurso sobre Catalunya que Felipe VI pronunció el 3 de octubre y que ha calificado de "chusquero" o las imágenes de la Reina Letizia en la catedral de Palma "más propias de Juego de Tronos".

Y para subrayar sus argumentos ha recordado que el excantante de La Polla Records Evaristo, multado por insultar a la Policía en un concierto en Cádiz, proclama en una de sus letras: "Quiero vivir sin currar y que lo pague el país/ seguir así no es para mí/ quiero veranear en el Palacio Real/, yo quiero ser rey/ quiero ser rey".

El secretario de Estado no ha hecho referencia alguna en su respuesta a este cantante ni a las letras de sus canciones, pero sí se ha mostrado muy molesto por el hecho de que el senador Iñarritu hubiera tachado de "chusquero" el discurso que el jefe del Estado pronunció el 3 de octubre sobre el desafío secesionista catalán.

Bermúdez de Castro ha considerado que incluso dentro de la libertad de expresión ese calificativo "pasa las líneas rojas", ha dejado claro que una "amplia mayoría" de los ciudadanos estuvo de acuerdo con Felipe VI y se sintieron "orgullosos" de sus palabras, y ha insistido en que no le parecía "oportuno" que la expresión figurara en el Diario de Sesiones de la comisión.

Además, ha acusado al senador de EH Bildu de "confundir" su forma de pensar sobre la Monarquía "con lo que le gustaría" que los españoles dijeran en las encuestas al evaluar las instituciones.

En este sentido, y aunque no ha dado una explicación concreta de los motivos que tiene el CIS para no preguntar por la Monarquía, sí ha remarcado que según el último barómetro del instituto demoscópico público para el 99,6 por ciento la Monarquía no es un problema y para el 99,99 por ciento no le afecta personalmente.