DONOSTIA. El ertzaina fallecido tenía 54 años y era vecino de Zarautz. El accidente mortal se produjo a las ocho de la mañana en la N-1, a la altura de la salida de Irura. El agente se encontraba regulando la circulación para agilizar el tráfico con motivo de un accidente anterior ocurrido en ese lugar cuando fue atropellado por un vehículo que circulaba por esa vía.

Los sindicatos, ErNE, ELA, ESAN, SIPE, CCOO y Ertzaintza-EUSPEL han denunciado la "falta de medidas de seguridad propias", la "falta de protocolos específicos" en materia de seguridad, -todo ello "como consecuencia de la derogación de la instrucción 53" que sí recogía los mismos-, así como el "mal estado del material diario de trabajo".

Además, han exigido al Area de Prevención y Salud Laboral que, "de una vez por todas", se "implique y actúe" realizando una investigación "exhaustiva" de los hechos ocurridos y "asuma su responsabilidad" en la seguridad de los trabajadores de la Ertzaintza.

Las centrales sindicales han exigido también al Departamento vasco de Seguridad que "no demore el reconocimiento como acto de servicio" del fallecimiento en accidente laboral del agente y han invitado a todos los ertzainas a que muestren "su malestar" acudiendo a la concentración del martes.

SOLIDARIDAD

Asimismo, trabajadores de las UTEs de mantenimiento de carreteras de Gipuzkoa, que llevan ocho meses en huelga, han manifestado su "solidaridad" con el ertzaina fallecido y sus allegados, tomando parte en la concentración de Oiartzun, y han lamentado que, "por desgracia", lo sucedido el lunes "no es un hecho aislado".

"En los incidentes y/o accidentes que se producen en nuestras carreteras, tanto Ertzaintza como nosotros, trabajamos en común y es evidente que sufrimos un riesgo que no quiere ser abordado desde ningún estamento", han denunciado, al tiempo que se han sumado a las reivindicaciones de los ertzainas "en relación a falta de medidas de seguridad y protocolos eficientes para que esto no vuelva a ocurrir".