Bilbao. El Departamento de Sanidad adjudicó ayer de manera provisional las urgencias domiciliarias en Bizkaia y Gipuzkoa a una empresa que carece de los profesionales sanitarios para prestar el servicio. Según ha podido comprobar DEIA, desde que fue consciente de que iba a ser contratada por Sanidad, a principios de noviembre, dicha sociedad está inmersa en un carrera por contratar profesionales. Además de buscar sanitarios por los métodos habituales en prensa y webs de ofertas de empleo como Infojobs, está intentando captar médicos y ATS entre las filas de quienes aún trabajan para la actual adjudicataria. Su objetivo es tener la plantilla completa para dentro de 15 días hábiles: es el requisito para que la adjudicación provisional se convierta en definitiva.
Después de meses de retrasos y semanas de rumores y filtraciones a la prensa, ayer se precipitó la resolución del nuevo contrato de asistencia sanitaria domiciliaria urgente y enfermería programada, que hasta el momento prestaba la empresa Medical Dom. A la misma hora, mediada la tarde, en la que un portavoz del Departamento de Sanidad desmentía a este medio que se hubiera firmado la adjudicación, las empresas que concurrieron al concurso recibían a través del correo electrónico la decisión firmada por el viceconsejero de Sanidad, Jesús María Fernández.
Como había dejado entrever la propia consejería, el contrato ha recaído en la empresa Servicios de Hospitalización Domiciliaria SLU, perteneciente al grupo Gasmedi 2000, para dar servicio en Bizkaia y Gipuzkoa, y en Eulen Servicios Sociosanitarios SA para Araba. Las dos son las mejor valoradas por la Mesa de Contratación.
La trascendencia del asunto está vinculada a la relación de Medical Dom con José Carlos Margüello, ex jefe de la Unidad de Calidad del Hospital de Cruces y que tiene un 9% del accionariado de la empresa. Tras la llegada del consejero Rafael Bengoa al Gobierno vasco, el departamento acusó a varias sociedades relacionadas con Margüello, entre ellas, Medical Dom, de irregularidades en los contratos que tenían con Sanidad. En concreto, los nuevos responsables socialistas anunciaron su intención de sacar a concurso las urgencias hospitalarias con la intención de apartar a la empresa que lleva 17 años ofreciendo el servicio.
Al día siguiente de abrirse las plicas con las ofertas, a principios de noviembre, el periódico El Mundo daba por seguro que Servicios de Hospitalización Domiciliaria-Gasmedi (SHD-Gasmedi) y Eulen serían las adjudicatarias. Posteriormente, el mismo diario afirmó que eran las sociedades a las que Sanidad "tenía previsto adjudicar las urgencias a domicilio" y que el departamento "no teme que la actual prestataria, Medical Dom, recurra su decisión porque esta se ha tomado con plenas garantías y está avalada por informes jurídicos". Al parecer, la adjudicación provisional ha estado varada mucho tiempo a la espera del informe de la Oficina de Control Económico del Gobierno vasco.
Sin embargo, Medical Dom advirtió ayer que, en concreto, SHD-Gasmedi está tratando de captar personal de su plantilla. "Ninguna licitadora puede acudir a desmantelar la plantilla de personal de otra ostentando que es la adjudicataria del concurso cuando no es cierto porque aún no se ha adjudicado", dijeron fuentes de la empresa. A su juicio, se les "ha apartado del servicio por la puerta de atrás, sin rubor", sustituyéndoles "por organizaciones sin experiencia que además no cuentan con los medios exigidos".
"Legal y transparente" Por su lado, el delegado en Euskadi del grupo Gasmedi, Rafael Aguirre, manifestó a este medio que su empresa "no va a entrar en guerras" con otras firmas y que el concurso se está llevando a cabo de manera "legal y transparente". Asimismo, aseguró que su grupo "ha ofertado un modelo de gestión y por eso se nos ha puntuado de manera tan alta, no por el número de trabajadores fijos que tenemos". Señaló que Gasmedi cuenta con médicos y enfermeras "en el ámbito español", en el que ha operado hasta el momento, y que no contaba con profesionales sanitarios en Euskadi "porque no se había aprobado la adjudicación".
Este periódico pudo comprobar ayer que SHD-Gasmedi ha contactado desde mediados de noviembre con varios médicos para tantear su disponibilidad de aceptar un empleo de la nueva adjudicataria. Un facultativo de la plantilla de Medical Dom empleado en las urgencias domiciliarias en Gipuzkoa aseguraba ayer que, en la entrevista con una representante de SHD, esta le informó de que "en principio contaban con los facultativos que trabajaban en la actualidad", aunque "no con todos, porque iban a reducir el número de médicos del servicio".
Oferta "mejorable" pero... Así es a tenor de la valoración realizada por la Mesa de Contratación. La propuesta de SHD-Gasmedi contempla menos médicos para atender las urgencias domiciliarias en Bizkaia y Gipuzkoa, y sus áreas de desplazamiento serán más amplias. De hecho, y se dice textualmente en la valoración, "de entrada parece que los tiempos de respuesta puedan ser altos y la gestión de recursos se dificulta. Se concluye, pues, que la oferta para la zona es mejorable". La Mesa de Contratación se molesta en poner un ejemplo de estos tiempos de respuesta: "Así, en el área de Amorebieta, si tiene que ir desde Bermeo a Igorre, el tiempo oscila entre 50 y 65 minutos solo de desplazamiento en coche en buenas condiciones de tráfico, sin contar el tiempo de demora hasta que se finaliza el primer aviso, recogida de coche, aparcamiento, etcétera.". Pese a estas dificultades, la Mesa de Contratación ha acabado valorando con la mayor puntuación a SHD-Gasmedi y a Eulen.
Otro facultativo consultado por DEIA manifestó que la entrevistadora de Gasmedi "iba sondeando a cada médico con el que se reunía para recabar información sobre las dificultades" del plan que tenían previsto y "afinaba" sobre la marcha las propuestas. Un tercer profesional sanitario señaló que había sido Osakidetza la que facilitó a Gasmedi los teléfonos de algunos empleados de Medical Dom.