Juan Carrascal y Natalia Gómez ‘vuelan’ junto a la ría en la carrera Las Arenas-Bilbao

Una célebre cita que habitualmente se disputa el último domingo del año, pero que modificó su fecha al coincidir con las festividades de Navidad y Reyes y múltiples carreras de San Silvestre. Después de los festejos y los excesos, los participantes estaban con ganas de correr esta prueba deportiva que data de 1930, pero que tras múltiples interrupciones se reanudó de forma definitiva en 1995, siendo la segunda cita más antigua del Estado tras la Jean Bouin catalana. Ya sin restricciones por el covid, fue una auténtica fiesta.

Juan Carrascal y Natalia Gómez cruzan la línea de meta en Uribitarte. OSKAR GONZÁLEZ

La carrera comenzó a las diez y media de la mañana en Getxo, junto al Puente Bizkaia. Algunos atletas madrugaron para calentar con tiempo, inmortalizar la ocasión con fotos y comentar previamente la estrategia de carrera. Otros llegaron con el tiempo más justo y aprovecharon la calle Mayor de Las Arenas para calentar a última hora. Tras la salida, enseguida los atletas enfilaron la carretera de la margen derecha de la ría del Nervión en dirección a los municipios de Leioa y Erandio remontando la ría durante más de cinco kilómetros hasta llegar a la capital vizcaina. Durante esos primeros kilómetros iniciales se formó un amplio grupo de cabeza formado por una veintena de corredores y el primero en desatar las hostilidades a partir del tercer kilómetro fue el que a la postre sería el ganador Juan Carrascal, del club atletismo Santurtzi e integrante también del Alusigma Peñota Dental de triatlón. Sin embargo, después de un tramo en solitario de entre tres y cuatro kilómetros, justo al entrar a la capital vizcaina, Juan vio por el retrovisor la llegada de Mikel Ugarte, segundo clasificado, y contemporizó en busca de una referencia de cara a la llegada a meta. “He visto que venía y le he esperado, me he puesto detrás de él y hemos disputado el sprint final”, resumió a su llegada a meta.

Épico esprint en Uribitarte

Precisamente, tras darle caza, Mikel Ugarte, del club ANB de triatlón, trató de romper la carrera, imponiendo un ritmo fuerte, para tratar de soltar a Juan, algo que no consiguió. De esta manera, tras una dura pugna, ambos enfilaron la línea de meta brindando un épico esprint final al público. Mikel llegó por delante, pero a escasos metros de la meta Juan vio la ocasión perfecta para asestar el golpe definitivo a la carrera. “Cuando se ha puesto en paralelo he visto que se me iba a hacer largo y he acabado pagando el esfuerzo de tirar los últimos kilómetros”, reconoció Ugarte, que a pesar de quedarse con la miel en los labios se mostró satisfecho por disfrutar de una “espléndida jornada” de atletismo.

Sobre esta línea, seis minutos después del ganador cruzó la línea de meta la primera mujer, Natalia Gómez, del club Bilbao atletismo Santutxu, quien corrió por primera vez la prueba cosechando un espectacular resultado. En 44 minutos y 3 segundos completó los 11,9 kilómetros disfrutando en todo momento del recorrido. “Es una carrera preciosa, me ha encantado el recorrido. Hemos tenido todo el rato el viento a favor y una temperatura agradable para correr. Las vistas de la ría durante todo el recorrido son espectaculares y luego en la meta ha habido un montón de gente animando”, resumió satisfecha.