“Cumplí la mayoría de edad el jueves, ¡justo a tiempo!”. Dorleta Suso participó ayer domingo en sus primeras elecciones. “Miré en el censo y todo, tenía ganas”, confesó. Aunque esperó para hacerlo a quitarse el vestido y los complementos que la distinguían como una de las mujeres romanas del cortejo de Poncio Pilato. Sí, porque la Semana Santa de Balmaseda se ha extendido este año más de lo habitual. Al coincidir la fecha del 6 y 7 de abril que hubiera correspondido con la final de Copa, el Vía Crucis adolescente de Santo Domingo se retrasó hasta el 20 y el 21 de abril. Otra fecha significativa: los comicios al Parlamento Vasco en los que muchos de los adolescentes participantes pudieron ejercer su derecho al voto por primera vez.

Al bajar de la cruz tenía previsto pasar por el colegio electoral Koldo Gurruchaga, de 18 años, que dio vida a Jesucristo. “Luego, luego iré”, respondió divertido a las sugerencias de que se acercara aún vestido para el Vía Crucis. Desde que hace un año le comunicaron que sería el protagonista “no me he cortado el pelo, tan sólo lo he retocado”, admitió “muy contento” por cómo habían transcurrido el sábado por la noche las escenas con diálogos en torno a la Última Cena. Se mostró completamente de acuerdo en posponer la Pasión Viviente porque, en plena efervescencia de la alegría por el título del Athletic, “casi no iba a haber gente viéndolo”.

Sí que se celebró la Pasión Viviente infantil –dirigida a menores de 14 años– la mañana del partido con la fachada del edificio consistorial envuelta en una tela rojiblanca. Al terminar los penaltis una procesión recorrió el casco histórico con una juvenil guardia romana ataviada con camisetas del Athletic. “Yo tocaba el tambor. Es una tradición la noche de la Última Cena de los niños” y en esa ocasión, al día siguiente, “no podía terminar de otra manera que con cánticos también de quienes salían de los bares”, recordó Aimar Ibargüen, de 20 años.

Sevilla y la gabarra

Ander García, de 16 años y que encarnó a Pilato en 2023, se encontraba en Sevilla el 6 de abril. Vivió el triunfo de los leones “desde la Athletic Hiria con un ambiente extraordinario, pero más de liberación por habernos quitado la presión de cuarenta años sin ganar la Copa y tantas veces de quedarnos a las puertas que de euforia”. Eleder García, de 19 años, ejerció ayer de gobernador romano. Ambos rebobinaron hasta la histórica gabarra. “Salimos de Balmaseda a las 9.30 horas y cogimos sitio casi en primera línea de la ría. Había una atmósfera genial, nos hicimos amigos de un montón de gente”.

A Dorleta Suso le habían programado un examen a primera hora del 11 de abril. En cuanto terminó cogió sitio con sus amigas “cerca del Zubi Zuri y allí estuvimos hasta cerca de las 19.00 horas”, rememoró a punto de abandonar los locales parroquiales para comenzar la Pasión Viviente. En fila siguió también Mateo Ibargüen, de 16 años, Caifás, que presenció la final “en un pueblo de La Rioja donde se preparó una fiesta tremenda” y, de vuelta en Bilbao para los recibimientos oficiales acompañó a la comitiva de los jugadores “desde el ayuntamiento a la Diputación”.

39 años implicada

Imágenes que no olvidarán, como tampoco las del Vía Crucis de este año tan singular. Montse Valle y aproximadamente otras diez personas voluntarias se preocuparon de poner a punto el vestuario y ayudar a los jóvenes a vestirse. La de Santo Domingo es, junto con la infantil de La Magdalena, una de las dos que perviven de las que se representaban en los barrios de Balmaseda. Ella empezó a tomar parte “a los 16, cuando sobrepasé la edad de salir me metí a colaborar y tengo 55 años”. Se genera tal unión que “a los que van creciendo les da pena”, pero siempre encuentran la manera de continuar ligados a estos Vía Crucis que sientan las bases para ascender de categoría al Jueves y el Viernes Santo. Como Míriam Fernández, la hija de Montse, que con dosis de paciencia, precisión y maquillaje, creó cicatrices que simulaban la lepra junto con Diana Torre. Para aumentar la representatividad de las niñas “se han introducido más personajes y la mujer de Pilato va a hablar por primera vez durante el juicio”. Tradición que se actualiza.