El Bachillerato es la etapa educativa menos valorada por el alumnado, mientras que los profesores solicitan dar más importancia a la lectura. Y las familias, por su parte, reclaman más cuidado emocional. Estas son algunas de las conclusiones que se extraen del último informe impulsado por el Instituto de Evaluación y Asesoramiento Educativo (IDEA) de la Fundación SM, llevado a cabo durante los meses de febrero a mayo de 2022 y en el que han participado 72.726 alumnos desde 4º de Primaria a Bachillerato y FP, 12.168 docentes, 40.155 familias y 503 centros educativos de todo el Estado.
Álvaro Marchesi, coordinador de este proyecto, analiza algunos datos relevantes de este informe, como el hecho de que alumnado, profesorado y familias se muestren satisfechos del funcionamiento de sus centros y de la enseñanza que se imparte. “Hay, sin embargo, dos ámbitos a los que hay que prestar especial atención: el cuidado del bienestar emocional del alumnado, lo que exige incorporarlo en el proyecto del centro y en el tiempo de tutoría, y el cambio metodológico para avanzar en metodologías activas, cooperativas y por proyectos. “El nuevo currículo es una oportunidad que se debe aprovechar para impulsar los cambios necesarios”, destaca Marchesi.
Por su parte, Mayte Ortiz, directora de la Fundación SM, sostiene que “con estas evaluaciones promovidas desde IDEA, queremos colaborar con los centros educativos en su afán por mejorar la calidad educativa en términos de equidad y excelencia”.
Asimismo, el estudio muestra datos muy positivos sobre la comunidad educativa, ya que el 80 del alumnado, docentes y familias están satisfechos con el funcionamiento de sus centros y todos manifiestan una actitud positiva hacia la inclusión educativa.
Cerca del 80% del profesorado y las familias reflejan esta percepción compartida por el 63% del alumnado. El 78 % en Primaria y resto de las etapas en torno al 55%.
Sin embargo, el estudio muestra que el bienestar emocional del alumnado- especialmente en Bachillerato donde se sienten menos satisfechos- o el cambio metodológico, se encuentran entre los principales retos.
Además, resulta preocupante el porcentaje de alumnado que se siente maltratado habitualmente por sus compañeros y que muestra la necesidad de analizar el problema y plantear iniciativas.
Principales conclusiones por grupos de estudio
Analizando las valoraciones por los diferentes grupos, destaca en el apartado de alumnado que el 5,3% se siente maltratado por sus compañeros a menudo o de forma habitual, un porcentaje que se eleva al 7,9% en los últimos cursos de Educación Primaria.
Otro aspecto estudiado es que el 64% del alumnado se siente satisfecho con la educación emocional recibida, un porcentaje que se reduce al 43% en el Bachillerato.
El 66% del alumnado valora positivamente la tutoría, y más de la mitad selecciona más actividades fuera del centro para poner en práctica lo aprendido como el cambio más importante para mejorar la calidad de la enseñanza.
Respecto a las asignaturas mejor valoradas por el alumnado, están las matemáticas seguida de la Lengua Extranjera.
Hablando del profesorado, el 98% analizado valora positivamente a sus alumnos y el 87% a sus equipos directivos y considera que hay que dar más importancia a la lectura en todas las áreas y materias. Por otro lado, los cuatro ámbitos en los que el profesorado demanda más formación y apoyo son: la respuesta a la diversidad, las metodologías activas, la enseñanza por competencias y el cuidado del bienestar emocional del alumnado.
Por último, el estudio ha analizado a las familias, quienes valoran positivamente el trabajo del profesorado. El cambio más importante que señalan las familias para mejorar la calidad de la enseñanza en sus centros es el cuidado del bienestar emocional de los alumnos.