Competir en la liga de la Gran Vía, donde los alquileres son prohibitivos, solo está al alcance de unos pocos. Por eso, la estrategia del Ayuntamiento de Bilbao, así como de las asociaciones de comerciantes, pasa por ampliar el tirón comercial de la arteria principal a través de otras calles adyacentes. “Son vasos comunicantes que funcionan como una extensión de la Gran Vía, donde es importante que haya buena ocupación de lonjas. Pero también queremos promover que los comercios locales encuentren su sitio en zonas centrales”, apunta Jorge Aio, gerente de BilbaoCentro, quien menciona calles concretas como Rodríguez Arias, Iparraguirre o Colón de Larreátegui.

De esa forma, Aio indica que trabajan para crear “ejes complementarios para habilitarlos en clave comercial”. En ese sentido, uno de los ejemplos recientes más destacables es el trabajo que se está realizando en Rodríguez Arias. “Es un eje transversal de las confluencias de los barrios de Indautxu y Abando. A través de Auzokide Plana propusimos su visión comercial”, explica el gerente de BilbaoCentro. Paralelamente, desde el Ayuntamiento exponen que “aprovechando el interés por el Museo Guggenheim y el movimiento de los visitantes por la Gran Vía se han potenciado las obras de semipeatonalización o peatonalización de las calles adyacentes a la Gran Vía”. En el caso de la calle Iparraguirre, con el claro objetivo de crear un corredor comercial.

En esa línea, desde el Ayuntamiento de Bilbao afirman que, entre las acciones recogidas en el Plan Estratégico de Comercio de 2025, hay algunas actuaciones encaminadas a mejorar los corredores comerciales en los que se pueden potenciar puntos de interés del visitante. De esa forma, el Consistorio abordó el año pasado la primera fase de la semipeatonalización de Rodríguez Arias, una obra que concluirá a través de una segunda fase. “El objetivo es que el peatón baje su ritmo y encuentre espacios estacionales pero también ese comercio que es diferente y ofrece un producto de valor añadido”, añade al respecto Aio, quien considera que es un eje de futuro.

El responsable de la asociación de comerciantes insiste en la importancia de este hecho en relación a una costumbre, la de ir de shopping, que está desapareciendo a favor de la compra compulsiva a través de internet. En ese sentido, Jorge Aio considera que se debe poner en valor la experiencia de ir de compras y, por otro lado, se debe promover el consumo de moda de calidad. “La moda de usar y tirar no aporta nada, todo lo contrario. Es un tema absolutamente insostenible y creo que al final lo barato, sale caro. Como plaza comercial, en Bilbao el consumidor debería tirar por una ropa más sostenible vinculada a la calidad y a la selección de moda que encaja con nuestro estilo”, sostiene.

Tiendas multimarca

El gerente de BilbaoCentro asume que una oferta comercial más allá de una Gran Vía potente es la que marca la diferencia de Bilbao con respecto a otras capitales. “Son calles que consideramos que deben albergar una oferta diferenciada, de calidad y atractiva para el consumidor”, expone Aio, quien destaca las tiendas multimarca de emprendedores locales que abundan en esas vías. “También creemos que hace falta promover corazones de barrio en Indautxu o Abando”, puntualiza Aio, quien enfatiza que esa puesta en valor debe ir de la mano con intervenciones urbanísticas. “Como en Manuel Allende, por ejemplo”, concreta.

Asimismo, en cuanto al precio de los locales, incide en que varía mucho en función de la oferta y la demanda. De esa forma expone que cuando se ven muchos locales vacíos este hecho hace pensar que una zona puede estar más deprimida de lo que está, “cuando realmente lo que ocurre es que hace falta que el propietario sea consciente de cómo está el mercado y haga los ajustes necesarios”.