¿Se perdió el sábado una oportunidad de oro para poner tierra de por medio con el descenso?

—No solo el sábado en Cornellà, sino la semana anterior en Teruel. Hemos perdido dos oportunidades de sumar más puntos y de ir quitándonos rivales de en medio. En Cornellà estuvimos muy bien, tuvimos ocasiones muy claras y nos anularon un gol, pero sí nos quedamos con esa sensación de que hemos perdido dos oportunidades muy buenas.

¿Cree que fue el mejor partido de la temporada fuera de casa?

—A mí me gustó mucho el partido y lo único que nos faltó fue conseguir el resultado, que era lo más importante, pero creo que también es positivo que el equipo haya dado esa mejor versión porque es la que tiene que mostrar en este último tramo. Tenemos que mantener ese nivel, pero, además, conseguir resultados.

El equipo ha crecido un montón. Ha llegado a ser cuarto tomando solo la segunda vuelta.

—Antes de viajar a Teruel sí que estábamos en puestos de play-off, ahora hemos bajado un poco. Pero el equipo ha evolucionado muchísimo, eso se está reflejando en el juego y los resultados, y creo que nos está lastrando el mal inicio. Pero creo que, tal y como empezaron las cosas y las dificultades que hubo, todos habríamos firmado estar a cuatro jornadas del final un punto por encima del descenso y con opciones reales de salvación. Por lo tanto, muy orgulloso de la evolución, de la mejora, del trabajo que estamos haciendo tanto el cuerpo técnico como los jugadores y lo que nos falta es ponerle la guinda al pastel consiguiendo el objetivo.

Sería increíble para el River, después de esta temporada de tanto sufrimiento, estar el año que viene otra vez en Primera RFEF.

—Tiene mucho mérito y yo estoy muy orgulloso de lo que estamos haciendo. Hemos tenido muchas dificultades, la plantilla era nueva, mal inicio, falta de gol... pero el equipo nunca se ha caído y todas esas dificultades nos han hecho todavía más fuertes. Estamos en una categoría que es una maravilla, para nosotros es un sueño poder competir con equipos como los que estamos enfrentando. Tenemos muchísima ilusión por que el año que viene podamos seguir disfrutando de esta categoría porque tiene muchísimo mérito.

Llega nada menos que el Deportivo a Las Llanas. ¿Qué partido esperáis? El ambiente va a ser el de las grandes citas.

—Es solo oír Sestao River–Depor y es que huele a fútbol. Creo que es un regalo poder disfrutar de este partido con nuestra gente, en Las Llanas, en un campo histórico, entre dos equipos históricos... Ellos están peleando por salir de esta categoría y volver al fútbol profesional y nosotros queremos aferrarnos a la 1ª Federación como sea. Dos objetivos diferentes; pero los dos queremos lo mismo este fin de semana, que es sumar los tres puntos. Creo que tiene todos los alicientes, ellos llevan 15 partidos sin perder, están en una dinámica ganadora, arrasando en esta segunda vuelta y, como hemos dicho, nosotros hemos hecho una segunda vuelta casi de play-off. Y dos de las mejores aficiones que hay en esta categoría, así que… va a ser un partidazo.

¿Por dónde se le puede meter mano a este Deportivo? El otro día se dejó dos puntos al final y eso le priva de poder ser campeón en Las Llanas.

—Es un equipo que tiene no ya solo el nivel de jugadores que tiene, sino el estado de forma en el que se encuentran. Creo que con esos jugadores tan brillantes, tan talentosos y tan enchufados y con tanta confianza, porque están muy cerca de conseguir el objetivo y ven esa posibilidad, el partido va a ser tan bonito como difícil. El otro día se vio contra el Arenteiro que todos tenemos nuestras debilidades y en eso es en lo que estamos centrados. En dar nuestra mejor versión, en hacer que ellos no tengan el día y anularles a nivel individual a esos jugadores tan brillantes que en cualquier detalle te pueden decidir el partido. Y nosotros tenemos que aprovechar nuestras opciones, porque en Las Llanas con nuestra gente somos capaces de todo, y sabemos que también tendremos las nuestras. Hay que hacer el partido que más nos interesa e intentar llevarnos la victoria.

¿Cómo ha vivido el equipo el cierre del campo y, después, la noticia de la suspensión cautelar tras los supuestos gritos racistas al portero del Rayo Majadahonda?

—Ojalá no hubiésemos tenido que vivir nunca una situación como la que vivimos el día del Real Unión, con el campo vacío, por algo que, a día de hoy, ni siquiera se ha podido comprobar. Lo vivimos con mucha alegría, sobre todo por nuestra afición, por tenerles cerca y porque ellos puedan disfrutar del equipo y de un partido como este. Una muy buena noticia, no solo para el vestuario sino también para toda la afición.