Perder kilos conforme vamos cumpliendo años se convierte en una misión cada vez más complicada. Esto no siempre se debe a que comamos más, sino que es producto de los cambios que nuestro cuerpo experimenta a medida que nos hacemos mayores.

Cuando nos encaminamos hacia los 50, disminuye la secreción de las hormonas sexuales (testosterona, estrógenos o progesterona) que controlan nuestro metabolismo, lo que hace que cada vez nos cueste más perder peso. En las mujeres, además, hay que sumar los síntomas previos de la menopausia que también favorecen que cojamos algún kilo de más.

Con la edad, también nos volvemos más sedentarios y nuestra musculatura pierde tono. La reducción de masa muscular se verá entonces sustituida en su mayoría por grasa, haciendo que el peso aumente.

Por todo ello, si quieres mantener un cuerpo saludable, a medida que sumes años debes prestar especial atención a tu dieta y al ejercicio físico y optar por todo aquello que te ayude a acelerar el metabolismo.

Hay ciertos hábitos y trucos que contribuirán a que tu metabolismo se acelere incluso cuando no estés activo lo que te ayudará a combatir esos kilos de más. A continuación te mostramos diez de ellos:

1- Haz sentadillas con pesas. Es un buen ejercicio para tonificar los músculos de los glúteos y las piernas y de paso trabajar el abdomen.

2- Realiza flexiones. Ayudan a fortalecer el tren superior sobre todo el pecho, los hombros y los tríceps, y los músculos centrales y de la espalda.

3- Practica la plancha abdominal. Usarás tu propio peso corporal para trabajar el core (músculos abdominales, lumbares, de la pelvis, los glúteos y la musculatura profunda de la columna) y otras partes del cuerpo.

4- Practica burpees. Es un ejercicio que mide la resistencia anaeróbica y con él se trabaja el abdomen, la espalda, el pecho, los brazos y las piernas.

5- Salta a la comba. Combinar los ejercicios anteriores con otros aeróbicos como saltar a la comba durante 15 minutos te ayudará a acelerar el metabolismo y a quemar más grasa. Es un ejercicio muy completo que te hará trabajar piernas, brazos y abdomen.

6- Toma alimentos saludables. Incluye en tu dieta frutas y verduras que tienen menos calorías y son ricas en vitaminas y minerales, incluida la fibra, que te hará sentirte saciado entre comidas.

7- Di adiós al azúcar. El cuerpo necesita azúcar y esta sustancia en sí no es mala. Está presente en alimentos como las frutas, las verduras y la leche. Sin embargo, debemos evitar los alimentos con azúcar añadido y los ultraprocesados.

8- Come despacio. Varias hormonas son las que le indican a nuestro cerebro que estamos saciados, pero no lo hacen de forma inmediata, sino que tardan alrededor de 20 minutos. Si comemos muy deprisa, ingeriremos mucha comida de la que necesitamos.

9- Alístate al batch cooking. Dedicar un día para preparar, en la medida de lo posible, la comida de toda la semana hará que te organices mejor e improvises menos. Tu dieta será mucho más equilibrada y comerás mejor si has decidido tus menús con antelación.

10- Bebe infusiones frías. Científicos suizos han demostrado que el té frío promueve la oxidación de grasas, quema grasas, libera energía y, además, puede reducir la carga metabólica en el corazón. El agua bien fría y el café solo también serán tus aliados.

Si sigues estos consejos y eres capaz de dejar a un lado el estrés y practicar la meditación verás cómo obtienes todavía mejores resultados.