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El artista que quiere hacer sombra a ‘Puppy’

El artista urbano Ampparito estrena obra en Bilbao con una extraña jirafa que ‘compite’ con el terrier del Guggenheim

El artista que quiere hacer sombra a ‘Puppy’

AMPPARITO (Madrid, 1991) se llama en realidad Ignacio Nevado y es un artista que ha tomado los muros universitarios de Bilbao. Con la ayuda de una brocha y acrílico, jubilando el clásico spray, Ampparito ha conseguido hacerse un hueco en la escena internacional por sus impresionantes obras en las que nada es lo que parece. Especialista en murales, los principales festivales internacionales de arte urbano (Nuart, Asalto, Poliniza dos o Le Mur de St Etienne?) han expuesto su trabajo que también se encuentran en puntos tan distantes como Nueva Zelanda, Reino Unido, India, Italia o Rusia. Pero este mes ha puesto el broche de oro a Tuenti Urban Art Academycon su primer mural en el campus de Leioa, un impactante estudio de la anatomía de una jirafa que puede contemplarse en la Facultad de Bellas Artes de la UPV/EHU, uno de los ocho centros seleccionados para llevar a cabo este proyecto.

“La idea ha sido unir mi experiencia personal en la universidad con pintar en una facultad de Bellas Artes. En la uni era todo el rato pintar modelos anatómicos y representar la realidad. Por eso ahora me gusta jugar con ella”, explica. “Cogí la idea de una jirafa, busqué un modelo anatómico de este animal y en lugar de ceñirme a su anatomía, lo que hice fue ceñirme al muro que en la parte más alta tiene diez metros y en la parte más baja tiene cuatro”, detalla, al describir gráficamente esta pieza. Por eso, sus obras hay que mirarlas más de una vez y, en ocasiones, obligan a frotarse los ojos.

“Con fhotoshop deformé un montón la anatomía de la jirafa para poder representarla en un muro y me ceñí al contexto, en detrimento de lo que es ese animal”, añade. Una absoluta deformación porque a este artista urbano le interesa sobre todo alterar situaciones cotidianas, objetos y realidades que damos por hechas. Subvertir, como él denomina, significados y realidades para generar nuevas experiencias y situaciones.

“Hay numerosas imágenes que desde la infancia asociamos a conceptos básicos: elefante gordo, hormiga pequeña o jirafa alta. Son asociaciones simples que damos por hechas y que conforman lo que denominamos realidad. Me parecía interesante representar las características hasta ahora conocidas de una jirafa, desde un punto de vista físico, esqueleto y sistema digestivo. Sin embargo, algo que en un principio resulta sencillo, un ejercicio técnico de reproducción, se vuelve un poco siniestro al entrar en contacto con una superficie limitada. Pero al fin y al cabo es solo un truco”, explica el artista. Ampparito ha llenado el campus de luz y color con sus trampantojos porque le gusta jugar con las ilusiones ópticas. “En realidad yo tengo ideas que parten de una base más conceptual. Y luego si tengo que recurrir a trampantojos es solo un medio para un fin”, señala. Ampparito reconoce que la obra vizcaina durará bastante, “porque está hecha a prueba de lluvia y de sol... Pintarán encima algún grafiti o algo, eso seguro. Pero tiene diez metros y es raro que a la parte más alta puedan llegar”.

El objetivo de la propuesta realizada en la Facultad de Bellas Artes ha sido acercar el circuito profesional a los estudiantes a través del arte urbano facilitándoles el contacto con destacados artistas y profesionales de esta disciplina, considerada por los críticos como “el arte genuino del sigo XXI”. Porque, en opinión de Ampparito, el arte urbano ha ganado terreno en campos en los que antes no tenía tanta visibilidad. Él mismo tuvo que lanzarse a la calle porque fue el único modo de realizar sus proyectos artísticos ante la imposibilidad de acceder al circuito de galerías, residencias o becas.