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Desfile de veteranos

Vehículos históricos, piezas singulares y alguna que otra joya cotizada recalarán el próximo fin de semana en el BEC, convocados en la octava edición de Retro Clásica Bilbao

Desfile de veteranos

Automóviles y motocicletas de antaño invadirán una temporada más los pabellones del Bilbao Exhibition Centre, respondiendo a la octava convocatoria de Retro Clásica Bilbao. El certamen reúne a doscientos expositores y espera convocar el próximo fin de semana en Barakaldo a cerca de 35.000 apasionados del mundo del motor. Este año van a poder contemplar una heterogénea selección de vehículos históricos, en la que destaca la presencia de uno de los dos ejemplares que quedan de la motocicleta Premeta, fabricada en Erandio. La nómina de piezas singulares y cotizadas incluye Rolls Royce centenarios, Mercedes-Benz de época, así como unidades de los entrañables Volkswagen Escarabajo y Seat 124.

Retro Clásica Bilbao se ha consolidado como una de las citas obligadas del calendario del motor. Así lo percibe José Enrique Elvira, el profesional gallego que promueve esta y varias muestras semejantes en la Península. “Llegamos a la octava edición con la misma ilusión que cuando se instauró la feria en BEC. El certamen, el mayor del norte de España, es ya una referencia del mundo de los clásicos y atrae a muchos aficionados del sur francés. En estos años hemos ido mejorando servicios para el público, como el parking de vehículos clásicos, la venta anticipada en Internet y la nueva subasta de coches on line en plena feria; siempre con el ánimo de progresar”.

Retro Clásica pide tiempo muerto y detiene momentáneamente el reloj para contemplar por el retrovisor coches y motocicletas de otro tiempo. De una época sin duda menos perfecta pero más humana, en la que no existía la electrónica y la robótica aún no había desahuciado a la artesanía. De ese pasado, que fue el presente para los aitites de la generación actual, proceden joyas como las que van a aparcar en el BEC.

En ese repertorio figuran tres participaciones que, por su vinculación a esta tierra, tocan la fibra sensible del público local. Una es la moto Premeta que ensamblaba en Erandio la empresa Taller Mecánico de Precisión SL a mediados del siglo pasado. Se trata de una de las dos únicas unidades de las que hay constancia, lo que la convierte, según los organizadores en “un ejemplar rarísimo”. De esta creación, inspirada en el Motobecane francés y considerada una de las monturas elegantes del momento, solamente se fabricaron unas veinticinco unidades, con mecánicas de 175 y 225 centímetros cúbicos. Se expondrá en el stand del club Goggomobil, junto a una de las últimas Torrot producidas en Gasteiz y a una Orbar, que en realidad era una Lambretta fabricada en Amurrio al cerrar la planta original.

Otros protagonistas cercanos del certamen son la Colección Miguel de la Vía y el Museo Aguinaga Mercedes-Benz, que expondrán sendas muestras de su patrimonio. De la Torre Loizaga va a llegar una selección de automóviles previos a la I Guerra Mundial. La integran varios Rolls Royce Silver Gosht (1910-1914), además de un Ford T (1914), un Cadillac Roadster (1909), un Buick Model 5 (1908) y un Delaunay Belleville 10 HP (1908). Por su parte, la marca alemana de la estrella va a estar representada por cinco valiosos ejemplares. Son un Mercedes Typ 170D de 1952 (modelo rebautizado en España como Lola Flores), un 300b Adenauer del 54, un 220 SE Coupé Pontón de 1958, un 190 SL de 1962 y un Pagoda 280 SL de 1970.

Entre las curiosidades de esta edición se encuentran las exposiciones de motos-sidecar y las que conmemoran los aniversarios de modelos tan emblemáticos como el VW Escarabajo y el Seat 124. De la mano del Club Plentziaclassic llega una pequeña recopilación de motocicletas con sidecar, ese anexo de carrocería hoy en desuso que permitía viajar acompañado de uno o dos pasajeros. Son vehículos pertenecientes a propietarios y colecciones particulares. La pieza más veterana es una Zündapp KS600 de 1941, a la que acompañarán modelos de las marcas BMW, Lambretta, MZ, Vespa, Ural y Dnepr.

Ochenta años del Escarabajo Si decimos Volkswagen Tipo 1 a pocos les viene a la mente el Escarabajo. Sin embargo, este apodo popular derivado de su apariencia acabó siendo asumido por la marca alemana como denominación comercial. El modelo, globalizado como Beetle (Francia mantiene el nombre de Coccinelle), alcanza los ochenta años y Retro Clásica Bilbao conmemora la efeméride con una exposición monográfica.

La colaboración de Eskarabajo Lagun Taldea ha permitido reunir una veintena de ejemplares de distintas épocas, desde los años cincuenta a la fase final de la producción de la generación precedente. Estos escarabajos irán acompañados de otras creaciones de la casa, como el Tipo 181, más conocido como Volkswagen Safari, y varias unidades de las furgonetas combi T1 y T2, convertidas ya en iconos.

El 124 cumple medio siglo El certamen no podía pasar por alto el aniversario del lanzamiento del Seat 124, al que dedica una exposición monográfica. Hace cincuenta años, la entonces marca estatal hispana con patentes de Fiat estrenó este sedan destinado a una clase media emergente. Por diseño y tecnología, la aparición del 124 inauguró una nueva era en el mercado español. Hay que tener en cuenta que fue el modelo pionero en instaurar el formato de berlina de tres cuerpos, con motor, cabina y maletero independientes, un diseño que proliferó durante años. El 124, producido desde 1968 a 1980, primero en Barcelona y luego en Iruñea, desplegó un repertorio con tres carrocerías: sedan, familiar y cupé. En esos doce años de vida, su evolución formal fue escasa; la modificación más llamativa afectó a las ópticas, que pasaron de ser redondas a cuadradas y luego dobles. Su abanico motriz inicial se reducía a una única alternativa de gasolina con 1.197 cengtímetros cúbicos, que suministraba sesenta caballos a las ruedas posteriores. Después fueron apareciendo variantes con 65, 75 y hasta 118 caballos, potencia de la versión deportiva 2000.