Un plato que se come las calorías
Un grupo de emprendedores de la UPV/EHU diseña una pieza de vajilla que absorbe los lípidos de los alimentos
El lema es sugerente: No cambies tu comida, cambia tu plato. Alumnos de la Escuela Superior Técnica de Ingeniería de la UPV/EHU han diseñado un plato que se come el 30% de las calorías de los alimentos que se ponen sobre él. El mecanismo de absorción de la vajilla está inspirado en las esponjas de mar, que poseen una serie de poros y canales que filtran el alimento y el oxígeno. A diferencia de las esponjas marinas, los orificios de los platos Hola, que así se llama el invento, están diseñados para filtrar lípidos (grasa y el aceite).
Tras dos años de desarrollo, un grupo de 15 emprendedores de la Escuela Superior Técnica de Ingeniería de la Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea han conseguido presentar Hola, un plato con la tecnología necesaria para reducir hasta en un 30% las calorías de algunos alimentos que se comen en él. Al tacto se trata de un plato de porcelana como los de cualquier vajilla casera, pero en su base dispone de más de mil agujeros pequeños con diferentes diámetros y profundidades. Esta diferencia es la que permite absorber grasas con densidades diferentes, lo que asegura que al comer patatas fritas, por ejemplo, en Hola se ingerirán unas 100 o 200 calorías menos.
Por lo demás, el plato se puede utilizar en el microondas y lavar en el lavavajillas porque la grasa que filtra no es difícil de eliminar. El utensilio está disponible on line en la web oficial de platohola.com
Picante y grasas No es el único motivo gastronómico por el que la UPV/EHU es noticia estos días. La universidad pública vasca dio a conocer ayer la tesis doctoral de Andrea Mosqueda Solís, que desvela que los pimientos picantes y los cítricos, como las naranjas, tienen compuestos que, por separado, actúan sobre la acumulación de grasa en el organismo, pero, si se combinan, se reducen esos efectos beneficiosos.
En su tesis, titulada Efectos de los compuestos bioactivos de los alimentos en el metabolismo lípido: aplicaciones en obesidad y alteraciones metabólicas relacionadas, la nueva doctora Mosqueda Solís ha estudiado en ratas los efectos de la capsaicina y la hesperidina, compuestos presentes en los pimientos picantes y en los cítricos (en el estudio se ha analizado principalmente la naranja), respectivamente. En la tesis se concluye que la capsaicina y la hesperidina actúan sobre la acumulación de grasa y trastornos relacionados con el síndrome metabólico, pero, si se combinan, se atenúan los efectos beneficiosos producidos por cada molécula cuando se administra individualmente.
Por separado, ambos compuestos mejoran el perfil lipídico sanguíneo, disminuyen la acumulación de lípidos hepáticos y previenen la esteatohepatitis no alcohólica en ratas alimentadas con dieta occidental, aunque los efectos se mitigan o incluso se rompen con la combinación de ambos compuestos, sostiene el estudio.
La investigación se llevó a cabo desde dos enfoques. En primer lugar, Mosqueda Solís hizo estudios in vitro que consistieron en una exploración de 15 compuestos fenólicos para estudiar y comparar sus efectos a diferentes dosis en la adipogénesis (la formación de tejido adiposo o graso). Después realizó una aplicación en vivo para evaluar los efectos potenciales de la hesperidina y la capsaicina por separado y en combinación para prevenir el desarrollo de obesidad y alteraciones metabólicas, estudiando la ingesta de una dieta obesogénica en ratas. Esta tesis doctoral se ha realizado dentro del programa de doctorado de Nutrigenómica y Nutrición personalizada, en el que participan la UPV/EHU y la Universidad de las Islas Baleares. - DEIA / Efe
Más en Vivir
-
Esta es la razón por la que RTVE ha cancelado la emisión de 'La Revuelta'
-
Yon González, el chico bueno al que por fin le llegó un papel de “malo”
-
Cuando la solidaridad apagó el odio que circula por las redes sociales
-
Dos supervivientes de 'Aventura en pelotas': "En el apagón fui al súper y no vi personas, vi gente con miedo”