Conquistando la feria
El presentador Julian Iantzi recorre el recinto de la Azoka en busca de libros de "misterio" y música Se acordó de sus hijos y se interesó por el juego 'Matraka'
DURANGO. El segundo día de la Azoka coincidió con el primer día de un puente en el que muchos centros escolares impartieron clase. El timbre que abría la puerta a un día festivo se notó y mucho en la Azoka. Decenas de jóvenes llegaron, mochila al hombro, con ganas de conocer las propuestas en literatura y música.
Pocos son los que no conocen a Julian Iantzi, que estuvo en Durango en un acto con Mikel Urdangarin, y por eso ayer más de uno se acercó al presentador de programas como El conquistador del fin del mundo o El conquistador del Aconcagua. El tranquilo paseo por el recinto se vio interrumpido por la petición de posar para fotografías que muy educadamente les hacían.
Estando en Durango, el presentador no dudó en echar un vistazo y ver qué novedades se presentaban en las diferentes editoriales y discográficas. Aceptó la idea de DEIA de contar en qué se gastaría 100 euros en la Azoka y allá fue. "Me gustan los libros de misterio, de intriga, de los que enganchan", confesó el presentador, quien aseguró que no distinguía entre "euskera y castellano" a la hora de escoger un libro. "El último que me he leído en euskera ha sido Txirringaren aienean, que trata sobre dos chicas que fueron a Turquía y terminaron recorriendo todo el Este en bicicleta. Es una especie de diario", describió Iantzi, quien recordó que en castellano Los pilares de la tierra de Ken Follet había sido su última lectura. Y cumplió sus deseos de disfrutar del misterio con el libro Crímenes truculentos en el País Vasco, de Santiago Aizarna (10,20 euros).
Durante el paseo, Iantzi se detuvo ante el espacio de la editorial Txertoa, que ofrece una amplia gama de títulos con connotaciones históricas. "Este tipo de libros me gustan mucho porque la globalización está muy bien pero hay que conocer la historia de cada pueblo para evitar que se repitan los mismos errores", comentó el de Lesaka, que se detuvo en el libro de José Antonio Ardanza -Euskadi Bihotzean. Oroi-tzapenak- y recomendó el que el año pasado presentó el lehendakari Juan José Ibarretxe, El futuro nos pertenece. "Es interesante saber cómo han vivido ellos desde dentro una crisis, cómo defienden su vasquidad...", apuntó.
Ávido lector, aseguró que para él "cualquier momento es bueno para coger un libro". De lo que no es amigo es de comprar un libro y "dejarlo en la estantería" como si fuera un adorno. "Primero miro en casa a ver qué libros tengo y si me compro uno, lo leo enseguida", subrayó.
En esta lista de la compra tan cultural no podía faltar la música, que le "encanta" al presentador. Después de estar con Urdangarin, Iantzi se lanzó a la búsqueda de su disco Zuzenean, con un coste de 18 euros. Como si estuviera llenando el carro de la compra, el presentador también picó por el camino. Otsobi de Erramun Martikorena (15 euros) y Haize berri bat de Etxe (13 euros) fueron otras elecciones. Para Iantzi, el disco de Etxe tiene un significado muy especial ya que una de las canciones, Munduaren amaiera konkistatzen, está inspirada en las vivencias que tuvo el músico cuando participó en El conquistador del fin del mundo.
Además de música y literatura, la Azoka también dispone de stands de juegos. Pensando en sus dos hijos -de 6 y 12 años-, Iantzi se decantó por el juego de preguntas Matraka (37 euros) con el que pasar tiempo con la familia y disfrutar del ocio sin que el ordenador o las consolas guíen el tiempo. La cuenta ascendió a 93,20 euros pero como "buen vasco" destinó el resto del dinero para disfrutar de una "buena merienda, con el café y el bollo".