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"En Costa Rica vi dos ojos en el agua... ¡Era un cocodrilo!"

"En Costa Rica vi dos ojos en el agua... ¡Era un cocodrilo!"Foto: oskar martínez

bilbao. Su peregrinaje por las aguas de medio mundo comenzó en Escocia, en los lejanos mundiales de 1997. Desde entonces, Luis Abando ha conquistado tres títulos mundiales en un deporte, el kayak surf, que adora por encima de todas las cosas.

Cualquier deportista con tres títulos mundiales a sus espaldas tiene, al menos, una placa en el portal de casa... ¿Dónde está la suya?

Ja, ja, ja. No existe. Eso es cosa de los deportes más mayoritarios y profesionalizados, donde ya solo vale la victoria.

¿Usted renuncia a ella?

No, por supuesto que no. Una vez en el agua quiero ganar. Pero hay algo más. En este mundo se viaja con la cultura a cuestas y yo quiero llevar la vasca. Nosotros vamos a los lugares a conocer a otros pueblos y a transmitirles, también, una forma de ser. Es una cuestión de no estar ligado a las Federaciones.

Explíquese

Las Federaciones tienen una norma: tanto ganas, tanto vales. En las asociaciones hay otra manera de pensar, más libre. Vemos el deporte como una escuela de valores.

Donde aceptan a cincuentones como usted... ¿Se veía ahí hace 25 años?

No, no.

Cuantas veces le han dicho eso de "déjalo ya que te vas a descalabrar..."

La familia, nunca. Pero los amigos sí que me comentan que qué hago yo ahí, rodeado de jóvenes.

Eso, ¿qué hace?

Llevar un estilo de vida que me gusta y sentir algo único. El kayak surf te engancha.

Veámoslo con ejemplos...

Si sabes que a las siete de la mañana vas a vivir unas olas fabulosas, casi no duermes la noche anterior. Si sabes que aparecerán a 150 kilómetros de donde vives, vas a por ellas... ¡Es un vicio!

No diga eso, que hay quien achaca al surf 'malas costumbres'...

¿El surf libre, verdad? Quizás hasta mediados de los años noventa eso fuese así, pero ese mundo, sin desaparecer, ha quedado en algo residual.

¿Usted prefiere el surf encadenado, acaso?

Ja, ja, ja. No, no. Pero la competición te obliga a mejorarte, a perfeccionar tus movimientos. Me gusta ese reto.

Plantará la ikurriña en los mundiales de Outer Banks... ¡compite con la selección vasca!

Selección española no hay, ni participaría con ella. Luego hay que ver si llegamos a North Caroline, porque el huracán Irene lo ha dejado arrasado, pero vamos dispuestos a todo. Los vascos entramos en este deporte en precario, pedíamos prestados los kayak, viajábamos con lo justo. Nos decían: los vascos locos...

¿Y?

Desde comienzos de los 2000 nos hemos colocado en la élite.

¿Ha vivido situaciones surrealistas en este sentido?

En Brasil nos robaron la ikurriña. Pedimos otra y querían que compitiésemos bajo el lema "resto del mundo" porque éramos pocos...

¿Cómo acabó aquello?

¡Montamos una! Al final, apareció una ikurriña y la colocaron a la cabeza.

¿Ha visto al demonio en el agua?

He estado un par de veces bajo el muro. Es una sensación asfixiante, crees que no vas a salir.

No se me ocurre una situación peor a bordo de un kayak

En Costa Rica vi dos ojos en el agua... ¡Era un cocodrilo! Salí que no vea.