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Cuidado, que vienen curvas

La pasarela de Milán rechaza las tallas grandes y excluye a la modista Elena Miró

Cuidado, que vienen curvasFoto: deia

MIlán no da la talla. En la feria de las vanidades no hay lugar para las más rellenitas. El curve-â-porter, puesto de moda por la diseñadora Elena Miró, ha sido eliminado de un plumazo y la organización ha decidido excluir a la diseñadora italiana y sus modelos curvilíneos. La semana de la moda femenina de Milán, que arranca hoy, ha reabierto el debate sobre los cánones de belleza y el peso de las modelos, cargándose las tallas grandes y negando el pan y la sal a los kilitos de más en el Olimpo de lo chic. "En la moda milanesa no hay espacio para las mujeres con curvas. Me lo han comunicado en una carta", denuncia Elena Miró en el diario Corriere della Sera. La decisión confirma así que la moda no permite metrajes orondos y que ratifica de pe a pa a gurús de la moda como Anna Wintour, la editora de Vogue Estados Unidos, que se opone en redondo a las tallas XL.

La casa de moda Miró, que viste a las mujeres a partir de la talla 44, y está especializada en damas de cuerpo rotundo, estaba presente en la semana de Milán desde 2005, con colecciones que se venden en más de 35 países. Cuando la Camera Nazionale della Moda Italiana optó por claudicar a la aplastante realidad de las ventas e invitó al grupo Miroglio a desfilar, hubo más de uno que se rio a mandíbula batiente y hasta aparecieron chistes gruesos ya que ninguna otra pasarela daba su brazo a torcer mientras los esqueletos desfilaban en un ir y venir de crujido de huesos.

nueva estética Pero la ilusión ha durado poco. Y ahora la diseñadora italiana afirma que siente "desilusión y estupor" por la exclusión y asegura que las explicaciones que le han dado son "pretenciosas y ridículas". No en vano, Elena Miró ha trazado durante años los límites de una nueva sensibilidad de la estética femenina. La marca, creada en 1985, abrió su primera tienda en el 93 y cuatro años más tarde lanzó su primera campaña.

La moda se queda así como un reducto exclusivo de las flacas ya que el año pasado, Karl Lagerfeld, retiró sus creaciones de la firma sueca H&M, con la que había lanzado una colección especial. El motivo, su rechazo a realizar tallas más grandes, ya que su ropa no estaba diseñada para "gente gorda", según comentó el temperamental diseñador alemán. Algo similar ocurrió en la pasarela de Londres. El diseñador inglés Mark Fast decidió incorporar en el último minuto modelos más voluptuosas en su desfile y esa iniciativa de mostrar un extra de carne le costó la renuncia de su estilista y de su director de casting.

El presidente de la Cámara italiana de la moda, que organiza las pasarelas, Mario Boselli, quitó, sin embargo, hierro al asunto y explicó que se han excluido del evento oficial diez casas de moda para "mantener alta la imagen de la creatividad y el estilo del prêt-á-porter". El Corriere della Sera asegura que esta decisión ha permitido volver a la pasarela oficial a los modistos Dolce&Gabbana, que, por discrepancias con los organizadores, habían decidido organizar su desfile por su cuenta.

un paso atrás Miró, que este año ha celebrado el 25 aniversario, recuerda cómo en 2006 los responsables de la moda en Italia suscribieron un manifiesto en el que se comprometían a no permitir que desfilaran en las pasarelas menores de 16 años y modelos con evidentes problemas alimentarios. Para esta diseñadora, "la decisión de la Cámara de la moda da un paso atrás a nivel social". "Vestimos a mujeres normales. La talla más usada en Italia y en Europa es la 44 y no la 38, que es la que desfila en las pasarelas", añade Miró, quien ha recibido el título de Cavaliere (Caballero del Trabajo), que otorga la presidencia de la República, reconociendo su contribución a la "emancipación de las mujeres desde una concepción restrictiva de la belleza".

Porque la realidad y las estadísticas van a contracorriente de la moda y confirman las creaciones de Miró. Las medidas biológicas y antropométricas del cuerpo medio de la mujer actual, señalan que el 35% de las europeas viste por encima de la 46. Además otras pasarelas como Nueva York se han apuntado ya a los incuestionables datos de venta e invitan a desfilar a marcas como OneStopPlus.com, especializada en tallas grandes.