ES el sueño de cualquier comensal y el paraíso de los más glotones; la vajilla devoragrasa. Porque ya está aquí el plato que absorbe las calorías de la comida gracias a los más de mil orificios de su superficie que eliminan hasta un 30% de las calorías. Una ?joven empresa ha inventado Hola, una forma de disfrutar de la gastronomía sin renunciar a cuidar la línea. Este ingenioso plato, que se puede adquirir a unos 18 euros la unidad, ha sido diseñado en la Escuela Superior Técnica de Ingeniería de la Universidad del País Vasco, donde sus creadores han investigado, desarrollado y patentado ese sistema que filtra la grasa sobrante de la comida.

Bajo el lema No cambies tu comida, cambia tu plato, concentra lo último en tecnología culinaria. Es decir una superficie de más de 1.000 pequeños agujeros que tiene la capacidad de separar las grasas de los alimentos y absorberla. Según explican sus creadores, la base de esta vajilla de diseño esconde un mecanismo capaz de absorber el aceite, que puede ahorrar a los comensales hasta el 30% de las calorías de una comida. En una comida normal, esto supone de 100 a 200 calorías, lo que en una semana sería equivalente a no comerse dos Big Mac. “No queremos que nadie renuncie a la comida; intentamos que la puedan disfrutar acompañándoles en el cuidado de su salud”, explica el equipo multidisciplinar que se esconde detrás de este invento.

El mecanismo de absorción de la vajilla está inspirado en las esponjas de mar. Estos invertebrados poseen una serie de poros y canales que filtran el alimento y el oxígeno. Pero a diferencia de las esponjas marinas, los orificios de estos platos están diseñados para filtrar lípidos (grasa y aceite). Tal y como explica Ander Méndez, uno de los creadores, “hay que tener en cuenta la viscosidad dinámica y la densidad de cada aceite, ya que los distintos aceites que podemos encontrar en nuestros alimentos tienen diferentes propiedades de viscosidad y densidad”. “Este plato es perfecto para quienes quieran mejorar su calidad de vida. Somos honestos, no es un milagro en sí mismo, y apoyamos los hábitos saludables en la alimentación y deporte”, argumentan.

La ingeniería y el diseño de estos platos han sido premiados en concursos de diseño y tecnología culinaria ya que los patrones se basan en los kamon de la cultura nipona. Los kamon son insignias monocromáticas compuestas por siluetas cuyas proporciones representan la esencia del diseño japonés. Pequeñas obras de arte y simbología que esconden elevados principios matemáticos, al igual que estos platos.

Pero pese a la teórica complejidad del sistema, nadie tendrá que preocuparse si le ha tocado fregar ya que la limpieza no supone ninguna dificultad añadida y la vajilla es totalmente apta para el lavavajillas.