Tras años llenando las salas con el humor grotesco de Torrente, Santiago Segura es hoy un maestro del cine de humor familiar y de los programas de entretenimiento. Ayer se estrenó en Amazon Prime Video un nuevo concurso, LOL: Si te ríes pierdes, en el que ejerce de villano.

En una entrevista con Efe, Segura cuenta que le entusiasmó convertirse en “una especie de villano de James Bond” en este show que es una adaptación del programa japonés Hitoshi Matsumoto Presents Documental, y en el que, acompañado de sus esbirros Cañita Brava y Xavier Deltell, supervisará “a lo Gran Hermano” que los diez cómicos concursantes que participan no se rían. Pese a haber logrado que sus dos últimas películas (Padre no hay más que uno y su segunda parte) sean las más taquilleras de los dos últimos años, Segura sigue pensando que en España el humor arrastra ciertos prejuicios que lo alejan de reconocimientos y premios, algo que no le preocupa. Lo importante es, cuenta, el cariño del público y hacer reír a la gente en estos tiempos complicados.

¿Es ‘LOL: Si te ríes pierdes’ un programa apto para todos, incluso para quienes no le gustan los programas de humor?

—No hay nada infalible, pero hay tantos tipos de humor... Es ver cómo intentan destruirse los unos a los otros con todo su arsenal humorístico, humor escatológico, juegos de palabras, humor inteligente, humor físico... Se agreden unos a otros humorísticamente hablando, que es como deberíamos agredirnos los unos a los otros en la vida cotidiana, y entonces yo creo que todo el mundo va a encontrar momentos jocosos. Incluso al que no le haga ninguna gracia, le hará gracia ver cómo esta gente intenta reprimir su risa y a veces no lo consigue.

A diferencia de otros programas en los que ha participado, este es un show muy corto, solo seis horas de grabación, que los espectadores podrán ver en seis episodios. ¿Le ha sabido a poco?

—Siempre es importante quedarse con ganas de más. Lo triste es decir, madre mía, como haya una segunda temporada me corto las venas. Y a mí se me ha pasado volando, estoy deseando que lo estrenen para que sea un éxito y haya una segunda temporada.

Decía recientemente que sus películas deberían ser un servicio público, algo necesario en la sociedad. ¿Se hace en España suficiente humor?

—Yo creo que no. Necesitamos mucho el humor. Decía lo del servicio púbico medio en broma pero en serio porque las feromonas, la oxitocina, todas las hormonas positivas que ayudan al sistema inmunológico se producen cuando te ríes. En cambio, cuando tienes estrés, miedo y angustia, que es lo que nos está pasando al pensar “me vacuno o no, enfermaré o no, me pagarán el ERTE o no...”, eso genera cortisol, que es oxidativo y deprime el sistema inmunológico, así que es un círculo vicioso.

En su opinión, ¿tienen en España el respeto que se merecen el humor y los humoristas?

—No. El humor es despreciable, la risa no es seria. Pero en realidad a la gente es lo que más les gusta. Y yo lo noto, el cariño que les tienen a los cómicos. Yo que he hecho el programa, menciono a los diez cómicos y noto alegría en las caras. ¿Tienen prestigio o respeto estas personas? No. ¿Son unos parias de la sociedad? Tampoco. Son muy queridos. Y es que el cariño muchas veces es mucho mejor que el prestigio. Yo prefiero que me quieran a que me respeten.

En la presentación del programa usted aseguraba que los diez concursantes eran los mejores que se podían haber elegido. Si hay una segunda temporada, ¿se dirá lo mismo? ¿Hay en España mucha calidad en el mundo humorístico?

—Muchas no sé, pero dos temporadas más a este nivel sí podría haber porque se ha quedado mucha gente en el tintero. Estos son top, pero son muy variopintos. De la generación de Arévalo, imagínate si puede haber humoristas o gente que no son solamente humoristas. Porque Mario Vaquerizo, por ejemplo, no es un humorista, es un influencer o un marciano, pero hace gracia y de esos hay muchos. Si el público responde, este nivel podemos volverlo a dar.

“Las feromonas, la oxitocina, las hormonas que ayudan al sistema inmunológico se producen cuando te ríes”

“Incluso al que no le haga gracia nada, le hará gracia ver cómo intentan reprimir su risa y a veces no lo consiguen”