El presidente del Comité de las Regiones (CdR), Vasco Cordeiro, aseguró ayer que las autoridades locales y regionales de la Unión Europea (UE) “no pueden ser rehenes” de los Estados miembros “en situaciones en las que los gobiernos nacionales no les ceden los recursos”. Cordeiro consideró que “es difícil entender” porque algunas regiones y ciudades que, a su juicio, “están mostrando buenos resultados”, por otra parte, “no pueden usar más recursos”, y aseguró, en una conferencia de prensa, que contar con las administraciones más próximas a la ciudadanía garantiza, en su opinión, la “eficiencia” de las políticas públicas.
En este sentido, el presidente del CdR, el organismo que representa a los entes subestatales de la UE, advirtió de que la crisis climática y energética “puede agrandar las desigualdades entre regiones” y, para evitarlo, instó a los Estados a escuchar más su voz a la hora de abordar retos como la transición verde.
“Algunas de las áreas en las que impacta esta cuestión, como, por ejemplo, la energía, la vivienda o el transporte, son áreas que en muchos países ya están gestionadas por las ciudades y regiones”, señaló Cordeiro. “¿Que pasaría si la participación de las ciudades y regiones estuviese vinculada con la eficiencia de las políticas? ¿Hacemos esta participación una cuestión de interés a nivel europeo?”, se preguntó el político portugués, aludiendo a la necesidad de que Bruselas convenza a los Estados para implicar a sus regiones.
“El mayor riesgo (de no implicarlas) es tener instrumentos maravillosos sobre el papel que no están bien usados, que no están en un punto óptimo de implementación, por parte de aquellos que tienen la conexión más fuerte con la realidad”, avisó Cordeiro.
Con todo, el dirigente portugués manifestó su voluntad de “no buscar culpables” de la situación actual ni señalar, dijo a “instituciones, Estados y personas”.
Temor al apagón
Por otro lado, Vasco Cordeiro reclamó más apoyo a las autoridades locales para evitar el riesgo de que, según dijo, algunas ciudades “no tengan electricidad” este invierno.
“Percibimos señales preocupantes por toda Europa, con ciudades en riesgo de no tener electricidad y luchando para proporcionar servicios esenciales, como el transporte público y la gestión de los residuos, o simplemente mantener calientes a los niños en la escuela”, advirtió.
El dirigente portugués rechazó la idea de una Europa donde “la gente deba escoger entre comer o encender la calefacción” y, ante los cargos regionales y locales reunidos en el pleno, les recomendó que implementen medidas de ahorro energético. “Reducir la temperatura ambiente en edificios públicos, apagar las luces en los monumentos por la noche, reducir los límites de velocidad en zonas urbanas, invertir en renovables o concienciar a la población”, enumeró Cordeiro en la lista de medidas.
El presidente del CdR añadió que, más allá de superar el reto de la escalada de los precios de la energía, la UE debe seguir profundizando en su agenda climática a largo plazo y no encallarse en la resolución de la crisis actual.
A futuro
Menos dependencia. En un momento de crisis energética, derivada sobre todo por la guerra de Ucrania, el presidente del Comité de las Regiones (CdR), Vasco Cordeiro, se mostró partidario de reducir la dependencia del combustible fósil. “No deberíamos reducir nuestra dependencia del combustible fósil solo porque Europa dependa de Rusia en este aspecto, sino porque se trata de lo correcto, y es lo correcto desde hace décadas. Quizás esto sea un llamada de atención, pero nunca debemos perder de vista la fotografía grande”, aseguró.