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"No soy tan macarra como 'El Jonathan"

Protagoniza la obra que hoy estrena el Teatro Arriaga, 'Naturaleza muerta en la cuneta', con tres personajes diferentes. David Castillo es un actor jovencísimo que tiene una dilatada experiencia. Desde los siete años está dentro del mundo de la publicidad y la interpretación

"No soy tan macarra como 'El Jonathan"Rosana Lakunza

Bilbao. David Castillo es uno de los actores más conocidos de la televisión. Es El Jonathan, uno de los personajes principales de la serie de Telecinco Aída. Los espectadores de esta ficción le han visto crecer semana a semana, comenzó con trece años y ahora tiene veinte. Como actor combina todos los medios. Hoy, estrena en el Teatro Arriaga de Bilbao la obra Naturaleza muerta en la cuneta, dirigida por Adolfo Fernández.

¿Cómo es su papel en esta obra?

Naturaleza muerta en la cuneta arranca con un monólogo de un chaval, que es un joven adolescente y que de vuelta a casa, después de dejar a su chica en casa, se encuentra con un cadáver. Y sin comerlo ni beberlo, se ve envuelto en un problema bastante gordo. Además interpreto otros dos papeles más. Me encanta la obra.

Vamos, que la obra es suya.

Ja, ja, ja... El segundo personaje es el de un agente joven muy preparado y con muchas ganas de hacer cosas. Supone una gran ayuda para el inspector pero también le puede quitar el sitio y, además, como lo hace tan bien, a lo mejor le dan el puesto. El tercer papel es pequeño, en él soy un camello, y le tengo mucho cariño porque es un personaje que me gusta mucho hacerlo.

Si miramos hacia la televisión, le vemos pasar su adolescencia en el barrio Esperanza Sur de 'Aida'.

Sí, da esa impresión. Es como mi barrio de televisión. Empecé allí con trece años y allí sigo.

¿Lo identifica con algún barrio?

El éxito de la serie, también el de Esperanza Sur, es que se identifica con muchos barrios y que en cada ciudad hay un barrio como este: el lugar donde está el exyonqui, el macarra, la chica que quiere triunfar en Gran hermano o la señora que limpia las casas. Los personajes son identificables para muchos espectadores.

¿Un barrio de perdedores?

Bueno, yo no creo que sea un barrio de perdedores, creo que es un barrio de luchadores. Es gente que lucha con el día a día; gente que se enfrenta a una realidad, quizá una realidad más dura que la de otras personas. Son personas que viven con alegría y con ganas de salir adelante en una situación que no es buena. A mí, eso me parece de luchador y no de perdedor. Es gente que disfruta de la vida con los problemas que se les presentan.

Empezó muy joven en el mundo de la interpretación.

Comencé con siete años en el mundo de la publicidad y después empecé a grabar episodios en series de televisión, he hecho cine y después llegué a Aída que fue lo que me lanzó a la intemperie televisiva y me coloqué en el punto de mira de los espectadores. Es una serie a la que le debo mucho, igual que a la película Cachorro y a todas las cosas que he hecho hasta ahora.

¿Qué anunciaba usted a los siete años?

He hecho de todo. Recuerdo que el primero fue para el Ministerio de Agricultura, anunciábamos pescado congelado. He hecho coches, bollos, patés, El Corte Inglés... Todo lo que se te pase por la cabeza lo he anunciado yo.

En 'Aída', interpreta a un niño macarra, un adolescente macarra y a un joven macarra. ¿Le fue difícil coger ese punto?

Al principio sí, estaba llevado un poco al límite, pero no era el macarra delincuente, era el macarra travieso; después he ido creciendo en la serie y me he calmado un poco. De todas formas, de niño yo siempre he sido travieso y movido. Aunque también he sido aplicado para lo que he querido.

¿En los estudios?

Siempre los he llevado al día. Como anécdota, te puedo contar que en el casting para el papel de Jonathan, Carmen Machi dijo: Pero este niño tan bueno, ¿va a poder hacer de macarra? Cuando empecé a hacer la serie me dijo: Pues sí que podía, estaba yo equivocada. No me asemejo mucho al personaje de macarra pero siempre compartes cosas con el tío que te toca en el reparto.

¿Qué comparte con 'El Jonathan'?

Hombre, esas cosas que haces en cada etapa de la vida y que son normales, las de macarra no.

¿Le ha permitido su trabajo estudiar con normalidad a lo largo de estos ocho años?

Por supuesto, de hecho he llevado mis estudios año a año, sin problemas, hice la Selectividad y empecé a hacer Comunicación; pero la verdad, no es algo que me guste, lo que me gusta es lo mío y estoy con mis clases de interpretación y mis cursos de actor. Tuve que decidir y elegí aquello que me gustaba. No podía estar a dos bandas. Llevar mis estudios al día era la condición que me ponían mis padres: Tú puedes hacer esto siempre que lleves los estudios bien, me decían.

¿Era de los de sobresaliente?

Qué va, era de los de aprobar; con aprobar me conformaba, era suficiente.

Supongo que sería el chico más famoso del colegio, de su barrio... ¿Cómo ha llevado la popularidad siendo tan joven?

He tenido la suerte de que fue algo muy progresivo, primero empecé haciendo anuncios, después cine, después televisión en una gran serie y mis compañeros vivieron eso a la par que yo, estaban acostumbrados. No fui el chico que de repente empieza a salir en una serie famosa. En el cole era David, que ahora está haciendo otra serie y ahora Aída, pues qué guay... Así de normal era todo y no me diferenciaba mucho de los chicos de mi clase, de hecho con mis compañeros de colegio sigo teniendo mucho contacto y tengo entre ellos grandes amigos; es todo bastante normal.

¿En su familia había alguien que se dedicara a la interpretación?

La verdad es que no. Mi abuelo era más cantante y artista que el resto.

¿Cómo definiría a sus compañeros de serie?

Cada uno es un mundo, pero los definiría como mi familia. Son un universo para mí, con algunos llevo ocho años trabajando de continuo. Cuando hay grabación pasamos muchas horas juntos. Lo que te digo, una familia.