"Tenía un contrato de larga duración y mi intención era seguir"

Bilbao. Javier Hoyos habló ayer con DEIA poco antes de iniciar el regreso a Bilbao. Ha vivido nueve meses intensos de trabajo y ahora tiene a la vista un proyecto: descansar junto a su familia y cogerse unas vacaciones.

¿Cómo se siente?

En estos momentos estoy volviendo a mi casa y me siento feliz de ello.

¿Era consciente de su temporalidad?

Lo asumí porque mi casa tenía un proyecto muy importante, Carrusel deportivo. Lo asumí porque la persona a la que se lo habían ofrecido (Manu Carreño) no lo había aceptado. La casa quiso buscar dentro y yo firmé un contrato de varias temporadas.

¿Cómo lo ha vivido?

He hecho un año en antena. Lo he vivido como un grandísimo éxito. Los datos ahí están, seguimos siendo líderes. Además, en el EGM de abril habíamos empezado a ganar audiencia, subimos 200.000 oyentes los sábados.

¿Qué planes de futuro tiene?

A corto plazo son estar con mi mujer, con mis hijos, con mi familia y en mi entorno, que está a caballo entre Cantabria y Euskadi.

Un plan de futuro personal, pero ¿qué piensa hacer a nivel laboral?

Tengo proyectos sobre la mesa, unos me gustan más que otros. Tengo proyectos para volver al plano directivo...

¿Le apetece volver a dirigir?

Tengo que reconocer que después de este tiempo de estar en antena -llevaba doce o catorce años fuera-, me he sentido muy a gusto, muy querido por los oyentes. Tengo también alguna oferta para hacer alguna cosa en televisión, hay otros temas pendientes por ahí. No sé lo que voy a hacer. Te repito, estoy enormemente satisfecho. Aquellos que al principio me daban unos garrotazos tremendos a comienzo de temporada, ahora en Twitter me dicen que "están conmigo y que lo han pasado bien".

¿Ha hablado con Manu Carreño?

No tengo nada que hablar con él, creo que en su momento se le hizo una oferta, fue antes de hacérmela a mí. Ahora se le ha vuelto a hacer y ha aceptado. Si él me quiere llamar, hablaría con él y estoy dispuesto a contarle todo lo que sé.

¿Le ha sorprendido la sustitución?

Tenía un contrato de larga duración, este proyecto era difícil de narices; y sí, me ha sorprendido, yo tenía intención de seguir. En los últimos meses había pasado a disfrutar de este trabajo. La casa es la que tiene la decisión de cambiar y yo no tengo más que aceptar la decisión, y punto. Vuelvo a Bilbao, que es mi casa. Voy fastidiado, si te dijera lo contrario te mentiría, a nadie le gusta que le corten en un proyecto, pero al mismo tiempo estoy satisfecho porque vuelvo a casa.