bilbao. Segismundo López-Santacruz, ex director del aeropuerto de Bilbao, vuelve a ser noticia. Después de ser condenado a nueve años y medio de cárcel por cinco delitos cometidos al frente del aeródromo -falsificación, malversación de caudales públicos, fraude y cohecho-, la Audiencia de Bizkaia ha ordenado ahora la búsqueda y captura de su esposa, Laura Hernández. El juez condenó a Hernández a dos años de prisión por ser una de las beneficiarias del dinero desviado por su marido.

La Audiencia vizcaina dictó un auto fechado el 12 de abril y que ayer hizo público el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), en que indicaba que se había entregado la orden a la mujer del ex director de que ingresar en prisión "de forma voluntaria". Sin embargo, han pasado dos meses desde que se emitiera el mandato y Hernández no se ha presentado. "Ha transcurrido en exceso el plazo concedido", señala la Audiencia, por lo que, según establece la Ley de Enjuiciamiento Criminal, se ha emitido una orden a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de busca y detención.

Dos años de cárcel Hernández fue condenada junto a su marido a dos años de cárcel por receptación, es decir, apropiación de dinero de procedencia ilícita. Sin embargo, tuvo la oportunidad de librarse de la cárcel si devolvía 60.232 euros en concepto de responsabilidad civil por el cobro de comisiones de su marido en obras del aeropuerto de Sondika. Pero no se hizo cargo del pago y, tras dos meses de espera, se ha dictado este nuevo auto. El escrito de la Audiencia vizcaina ha sido notificado tanto a la Fiscalía como a las partes personadas. Cabe recurso de súplica contra él pero, en caso de llevarse a cabo, debería ser presentado en un plazo de tres días tras la notificación. Así, en el momento en que Hernández sea encontrada, será conducida a prisión, donde se encuentra su marido, Segismundo López-Santacruz, que ya ha cumplido poco más de un año de cárcel.

Fraude en el aeropuerto López- Santacruz fue director del aeropuerto de Sondika desde el año 1997 hasta 2001. En enero del pasado año, el ex director de Sondika fue condenado por un jurado popular a nueve años y medio de prisión por falsificación, malversación de caudales públicos, libramiento de certificación falsa, fraude y cohecho. Por todo ello, fue multado, además, con 948.000 euros y la obligación de indemnizar a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) con un total de 816.823 euros en concepto de responsabilidad civil por el cobro de comisiones por las obras del aeropuerto -empezaba ya a construirse La Paloma en Loiu-.

Entre las irregularidades cometidas por López-Santacruz durante su gestión al frente del aeropuerto, destaca el arrendamiento de su vivienda personal con dinero de AENA, aunque en realidad quien residía allí era su madre. Con lo ahorrado, López-Santacruz adquirió dos pisos que puso a nombre de su madre y de su mujer.