Unos 200.000 menores de 15 años en el Estado presentan talla baja relacionada con trastornos del crecimiento, sin embargo esto no es percibido por la mayoría de los padres como un problema de salud por lo que los diagnósticos llegan tarde y el tratamiento se demora derivando en complicaciones en la edad adulta.
Así lo revela una encuesta realizada por la compañía farmacéutica Novo Nordisk a un centenar de padres de niños con problemas de crecimiento en coordinación con la Federación Española Síndrome de Noonan y otras Rasopatías (FEDERAS), que constata que el 81,1% de los participantes conocía “poco o muy poco” acerca de los trastornos de crecimiento antes del diagnóstico de su hijo.
Esa desinformación hace que no se dé a la altura de los niños la importancia que requiere, por lo que Novo Nordisk ha lanzado una web que lleva por nombre Más Que Estatura con el objetivo de educar, informar y sensibilizar a los padres sobre los trastornos del crecimiento y potenciar una detección y control adecuado.
En opinión de la especialista en endocrionología y diabetes pediátrica del hospital general universitario de Alicante, Lorea Ruiz, un niño con talla baja es aquel notablemente más bajo que otros de su misma edad y sexo, pero ha precisado que esa talla puede entrar dentro de la normalidad o existir un motivo que la provoque y requiera un tratamiento específico (talla baja patológica).
Ha informado a su vez que estos trastornos no son percibidos por la mayoría de padres como problemas de salud asociados a un déficit de la hormona del crecimiento, por lo que el diagnóstico suele llegar tarde lo que dificulta el tratamiento temprano.
La especialista subraya además que la estatura de los niños depende de factores genéticos, ambientales y del ritmo de maduración pero hay patologías endocrinológicas, enfermedades crónicas severas, prematuridad, síndromes, obesidad e incluso situaciones de estrés que pueden afectar al menor en su crecimiento.
Actuación inmediata
Ruiz ha insistido en la importancia de estudiar al niño cuando existe un estancamiento de la talla junto con signos asociados como rasgos faciales peculiares, bajo peso, problemas con la alimentación o alteración del desarrollo psicomotor.
La misma especialista emplaza a los padres a consultar con el pediatra cualquier duda sobre el crecimiento de sus hijos y recuerda que una derivación temprana al especialista del crecimiento puede prevenir complicaciones en la infancia y en la edad adulta.
Por su parte, la Asociación Síndrome de Noonan señala cómo las familias llegan con muchas dudas por la carencia de información fiable por lo que consideran la creación de la web Más Que Estatura una buena herramienta como complemento a las consultas.
