Bilbao - A pesar de tener una orientación ideológica diferente al grueso de los consejeros del nuevo Gobierno vasco del PNV, los tres representantes del PSE en el Ejecutivo aseguraron que ambas formaciones se conjugarán en una acción conjunta de gobierno. Así lo afirmó Iñaki Arriola, el representante socialista de mayor perfil político del nuevo gabinete de coalición de Urkullu, en la que también están María Jesús Carmen San José y Alfredo Retortillo. “Por encima de las diferencias, este Gobierno va a compartir, ante todo, un programa en común y una común voluntad: servir a la ciudadanía vasca, mejorar las condiciones de vida de la gente, especialmente la gente que más lo necesita, y poner las bases para un futuro mejor”, aseguró nada más tomar posesión de su cargo como consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda.

Componente de un Gobierno vasco “integrado por dos partidos distintos, de orientación ideológica diferente y de tradiciones ideológicas a veces enfrentadas”, Arriola, sin embargo, adelantó que esa condición no mermará la puesta en común de una misma “voluntad”. “Vamos a sostener con todas nuestras fuerzas los pilares que definen una sociedad decente, garantizando que no se produce en Euskadi ningún retroceso en igualdad o solidaridad”, remarcó. El consejero, que en los últimos años ha ejercido como secretario general de los socialistas de Gipuzkoa pero que también conoce las interioridades de la administración de Lakua tras haber ejercido de consejero en el gabinete de López entre 2009 y 2012, no dudó en señalar que los tiempos venideros serán complejos. “Las cosas no van a ser fáciles”, profundizó sobre todo poniendo sus miras en el apartado económico. Aún así, esa situación no puede erigirse en “excusa”, sino que “más bien, al contrario, deben ser un aliciente” para ejecutar una acción de gobierno siendo “eficientes en la gestión”.

Desarrollar la Ley de Vivienda será uno de los ejes capitales de la nueva legislatura para Arriola, que priorizará el acceso de los ciudadanos a los programas de vivienda pública -con el alquiler o la rehabilitación de inmuebles como banderas-, aunque tampoco se olvidó de esquematizar sus retos al frente de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. En todo caso, y de la mano del “buen trabajo de todos”, confió en que el Gobierno sea capaz de “llegar a buen puerto y ofrecer los mejores frutos a la sociedad vasca”.

Las buenas palabras de Arriola tuvieron continuidad con San José y Retortillo, que tomaron posesión de su cargo en un acto en Gasteiz como nuevos responsables de las áreas de Trabajo y Justicia, y de Turismo, Comercio y Consumo. Profunda conocedora de la administración vasca, en la que ha desempeñado puestos directivos y funcionariado, la primera apuntó que aspira a que las aguas vuelvan a su cauce en el apartado de las relaciones laborales tras años de convulsiones entre los sindicatos y colectivos empresariales, en las que han existido “ciertas actitudes de incomunicación”. De hecho, les instó a “arriesgar y encontrarse” para alcanzar el diálogo. “La negociación colectiva es el pilar fundamental en que asentar las relaciones laborales. Hay que recuperarla, apuntalarla”, abundó.

“Abrumado” En lo que respecta a Retortillo, aseguró que se afanará en que el primero de los sectores, al alza en Euskadi durante los últimos años hasta llegar a generar el 6% del PIB, se convierta en “una industria en todos los sentidos”. “Abrumado” por dar el paso del “atril académico” a un plano “ejecutivo del proceso político-administrativo” en el Gobierno del lehendakari Urkullu, el consejero socialista apeló a conseguir “un equilibrio” entre el comercio mayorista “en continua revolución” y el comercio tradicional, “familiar, la mayoría de las veces, que da color y vida a los barrios”, en comercio. “Servir a la ciudadanía y aportar mi trabajo y mi conocimiento”, concluyó sobre la tarea que le ha sido encomendada en un Gobierno vasco de coalición que persigue superar las siglas para compartir un horizonte común.