Bilbao - Permanecer en el tiempo muerto de la legislatura estando a la espera de abrir la convocatoria de nuevas elecciones no ha sido óbice para que el grupo parlamentario Podemos-En Comú Podem-En Marea presentara ayer tres proposiciones no de ley para meter mano a un ámbito hiperregulado hasta la fecha, pero que no por ello ha estado exento de críticas. La formación morada instó ayer en el Congreso a “poner límites a la propiedad cruzada en medios de comunicación y adoptar otras estrategias de fomento del pluralismo”. El partido liderado por Pablo Iglesias reclamó echar mano de una regulación más estricta para que unas mismas manos no puedan manejar un conglomerado de empresas comunicativas que tengan su espacio en el espectro radioeléctrico que alberga a las televisiones y a las radios.

La proposición de Podemos, más encaminada precisamente a surtir un efecto mediático que a tener recorrido legislativo ante el cercano fin de la legislatura el 3 de mayo próximo, apela a la “diversidad” por la que el Estado debería de apostar “para situar nuestro espacio mediático a la altura de los estándares de calidad europeos”. Los gobiernos de turno son los encargados de “ordenar, legislar y poner a disposición de la ciudadanía y los agentes del sector de las radiocomunicaciones” un “bien de dominio público” que en ocasiones termina en unas pocas manos. De la misma forma presentaron otras dos iniciativas: la primera, encaminada a modificar la estructura de la agencia Efe -de titularidad pública-, incluso eligiendo a su director mediante concurso público; y la segunda, para impulsar un programa de fomento del tercer sector de la comunicación.

En la proposición de mayor calado presentada por los diputados Noelia Vera y Miguel Álvarez, Podemos y sus confluencias pusieron como ejemplo la reciente adjudicación de canales de televisión digital terrestre (TDT). Efectuado “a pocos días del inicio de la campaña electoral, en un uso claramente politizado y muy discutible de la facultad de otorgar licencias”, el proceso limitó “el derecho a la libre competencia” a la par que favoreció una “situación de duopolio”. En todo caso, las medidas a establecer no supondrían modificaciones de calado en el sector audiovisual actual -los medios escritos estarían exentos-, ya que tan solo afectarían a futuros procedimientos. Y tampoco hay margen de maniobra alguno, ya que el próximo martes expira la legislatura, por lo que su debate se abordaría en la Cámara Baja que salga de la cita con las urnas del 26 de junio.

La proposición no de ley sobre un uso democrático del espectro radioeléctrico, que así es como se llama la iniciativa, apela al “desarrollo de medidas que favorezcan la transparencia en los concursos públicos de adjudicación”, hasta el punto de que se establecerían “calendarios con objetivos y marcados por intereses generales y no puramente partidistas”. Del mismo modo, se crearía un Consejo Estatal del Audiovisual como un “organismo independiente” que supervisaría el cumplimiento de las obligaciones adquiridas por los licenciatarios”.

En lo que respecta a la agencia Efe, Podemos abraza la idea de acercarla a la fórmula de funcionamiento de la radiotelevisión pública, incluso estando sujeta “a control parlamentario” con programas-contrato, además de habilitar un “concurso público transparente y objetivo” para la elección de los miembros del Consejo de Administración y del director general y así “poner fin a su control gubernamental y opacidad”.