BILBAO - El PNV no está dispuesto a dejar en saco roto lo que consideran injurias y calumnias lanzadas desde el PP en las últimas semanas en las que se le endosan prácticas de corrupción e incluso deslizan la sospecha de una financiación ilegal de los casi doscientos batzokis y sedes de la formación jeltzale repartidos en toda Euskadi. La ejecutiva nacional del partido estudiará la situación en su reunión del próximo lunes para ver si acude a los tribunales a denunciar a los populares, una cuestión que todavía no ha decidido.
El presidente de la Ejecutiva del PNV en Gipuzkoa, Joseba Egibar, criticó ayer a la formación liderada por Arantza Quiroga por “lanzar acusaciones sin ningún tipo de prueba”. En declaraciones a Euskadi Irratia, afirmó que si las tienen deben presentarlas en el juzgado. “Se trata de una acusación política que no pueden probar ni mantener en el tiempo”, dijo el burukide jeltzale quien a continuación agregó que si tienen pruebas “las tienen que presentar en el juzgado”.
Desde finales de julio y durante todo el mes de agosto han sido varios los dirigentes del PP que han cargado en esta línea contra la formación jeltzale, desde Nerea Llanos hasta la propia presidenta del partido, Arantza Quiroga, pasando por dirigentes cualificados como Iñaki Oyarzábal o Laura Garrido. El último en sumarse a este coro ha sido el presidente de los populares de Gipuzkoa, Borja Sémper, quien este pasado lunes insistió en sembrar la duda sobre la financiación de los batzokis y, preguntado sobre si disponía de pruebas o datos, se limitó a decir que las acusaciones de su partido están basadas en “rumores”.
Egibar consideró que el PP de Euskadi tiene la “consigna” de extender la idea de que “todos somos iguales y, ante los muchos casos de corrupción que hay en España, ha optado por extender las sospechas” en torno a la financiación del PNV. “Todo es un invento” de un PP “sin rumbo”, añadió el jelkide, quien reclamó a los populares que actúen con “respeto a los demás antes de hacer nada”.
Estas acusaciones del PP han deteriorado aún más las relaciones entre ambas formaciones que ya de antes no gozaban de una buena salud desde la llegada de Arantza Quiroga al frente de la formación popular en sustitución de Antonio Basagoiti. De hecho no existen relaciones formales y las únicas que mantienen es a través del PP español y de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. - H. Unzueta