López niega la pugna en el PSOE mientras busca apoyos en La Rioja

Bilbao. La irrupción de la posible candidatura del diputado Eduardo Madina a las primarias del PSOE ha tenido la virtud de conseguir algo poco frecuente en los últimos tiempos de la formación socialista, como es el cierre de filas de sus dirigentes. El PSOE en su conjunto entonó por segundo día consecutivo el mantra de que "no toca" hablar de carreras sucesorias, incluido Patxi López, el otro posible candidato que, hasta la confirmación de las aspiraciones de Madina, se dibujaba como el jinete socialista más en forma.

Pero lo más interesante de las declaraciones de ayer de López, que por primera vez hablaba de las posibles aspiraciones del diputado vizcaino, era el subtexto que se adivinaba tras ellas. Y es que las hacía después de haber mantenido una reunión con el secretario general de los socialistas de La Rioja, César Luena, en la sede de Logroño, poco antes de encontrase con un grupo de militantes en Haro.

Casualidades o no, lo cierto es que el dirigente del PSE ha acelerado en las últimas semanas sus contactos con otras federaciones socialistas, lo que por otra parte podría haber precipitado la decisión del entorno de Madina de comunicar que el diputado vizcaino está dispuesto a escuchar a quienes le quieren como candidato a encabezar la plancha electoral socialista en las próximas elecciones generales.

La más notoria de estas reuniones fue la mantenida antes de Semana Santa con Tomás Gómez, el líder de los socialistas madrileños. En estos contactos con los barones del partido, según cita Europa Press de fuentes del partido, López no se postula directamente pero les sondea sobre la conveniencia de realizar un congreso en torno al próximo otoño, cuando está previsto realizar la Conferencia Política de la formación, o esperar a después de las elecciones europeas de 2014, como decidió en su momento el PSOE.

Se trataría de un signo inequívoco de que López sopesa la posibilidad de que el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, no pueda cumplir su hoja de ruta, que no contempla las primarias hasta pasadas las elecciones europeas y antes de las municipales de 2015.

Este es precisamente uno de los aspectos que quiso despejar ayer el PSOE tras la marejada de declaraciones que dejó el jueves la constatación de las intenciones de Madina. Y es que el secretario de Organización, Óscar López, salió a la palestra para confirmar que se mantiene el calendario de primarias, según el cual este año lo dedicarán los socialistas a la revisión de su programa y la modernización de sus estructuras. Esto significa que hasta el verano del año que viene no se pensaría en abordar quién será el candidato para tratar de acabar con la estancia de Mariano Rajoy en La Moncloa.

discurso oficial Mucho tiempo, quizá, para mantener el pulso sin contar con apoyos claros. La cuestión es que el secretario general del PSE insistió ayer una vez más, como siempre que se pronuncia en público, en que "no hay una carrera electoral" en el PSOE en busca de un candidato. Durante la rueda de prensa en la sede socialista de Logroño, reiteró que la prioridad de la formación en este momento es otra: "Sería un fraude que la respuesta de los socialistas ante lo que está pasando fuera solo cambiar la foto de un cartel".

Hubo que esperar a las preguntas de los periodistas para conocer su opinión de la posible candidatura de Madina, que por otro lado es parte integrante de la Ejecutiva el PSE que López preside. "Un gran compañero -lo describió-, un amigo de verdad, un magnífico socialista y un dirigente socialista". Como tal, añadió, Madina "está para sumar ideas".

El dirigente del PSE no desaprovechó la oportunidad para arremeter contra el presidente de La Rioja, el popular Pedro Sanz, por adoptar decisiones para hacer política local cuando López fue lehendakari "no defendiendo sus argumentos, sino atacando a su comunidad vecina". El secretario general del PP de esa comunidad, Carlos Cuevas, respondió de inmediato que no hubo relaciones institucionales porque "no admitió el chantaje" de López, al que descalificó por ir a La Rioja "a buscar votos en su campaña cainita por el poder en el PSOE".