LA confesión de la exalcaldesa socialista de Lasarte-Oria Ana Urchueguía de que cometió prevaricación y malversación de manera continuada ha zanjado la verdad judicial y la periodística gracias a la investigación de DEIA y Grupo Noticias. La vertiente política solo está cerrada en parte. Urchueguía dejó la alcaldía y está legal y políticamente inhabilitada. Pero falta la verdad política. Y falta porque alguien mintió y acusó de mentir a los periodistas, y lo hizo además en sede parlamentaria siendo nada menos que lehendakari. Patxi López tiene el deber de pedir perdón y restablecer esa verdad.