En tiempos tan confusos y complicados, como en los actuales, donde las guerras e intereses continúan siendo incompresibles, la situación actual de los refugiados viene generando argumentos críticos, por parte de la ciudadanía, contra todas las instituciones. Los pueblos son un producto de sus historias, estas, como es natural, defienden sus derechos, o buscan su relanzamiento, a la vez que se definen como generosos. Si el franquismo del 37 en Euskadi, solicitó también ayuda aérea de italianos y alemanes para arrasar y someter a la Villa Foral, hoy es necesario tener una visión más humanitaria y justa para solucionar el tema migratorio. Ante la pasividad de los Estados, se impone un impulso, con el fín, de intentar resolver la problemàtica de los refugiados. Los cuales huyen del horror y la miseria en unas “pateras de supervivencia”.

Iñaki Pana Bilbao Mungia