Votos de primera y segunda
Votos de primera y segunda son lo que el gobierno en funciones defiende a ultranza, basándose en ser el partido que más votos consigue. Pero no confundamos los términos, que muchos españoles le voten, no quiere decir que España quiere que les gobierne. Que en este país los ciudadanos veamos con preferencia más fútbol, programas de corazón y cotilleo, en vez de leer literatura, oír música clásica, visitar museos etc., traduce la falta de formación personal, nunca que estemos acertados en nuestra elección y mucho menos que se deban promocionar aún más los programas llamados coloquialmente basura. Pero para algunos solo son válidos los votos que les apoyan, los de primera, mientras que los que están en contra aunque sean más numerosos no son considerados de la misma calidad, son de segunda y por tanto minusvalorados. Si además cuestionan la vigencia constitucional o la legitimidad de exigir ciertos derechos?la calidad del voto es nula. Evidentemente hemos estado acostumbrados a votos de primera, de derechas o tolerantes con ella y cuando los votos de la izquierda, ahora definida como radical, irrumpen con fuerza en el horizonte añoramos las excelencias del pasado constitucional posfranquista.
José María Merino Zierbena