Los partidos no son corruptos. Algunos se corrompen en ellos. ¿Cierto? Cierto. No quiero entrar en lo de “y tú también”, “y tú más”. Una y otra vez al partido ganador en estas dos últimas elecciones le han sacudido los escándalos por activa y por pasiva, sin menosprecio de algunos otros. Pues bien: siguen ganando, por lo que, democráticamente, mi mayor respeto. Han realizado una segunda campaña que, por los resultados obtenidos, les ha ido bastante bien, instando al miedo al PSOE que, según dicen, tan mal lo hizo, e instando al dicho de “que vienen los comunistas” que nos van a venezolar tras romper el estado con referéndums. Dicen que han creado no sé cuántos puestos de trabajo, pero se les olvida decir que han cambiado al que ganaba 1.400 euros por dos que ganan 700 y lo mismo da que ganes 60.000 anuales que 300.000: idéntico porcentaje. En alguna comunidad autónoma, donde creo que solo falta por imputar o investigar alguna monjita de clausura, siguen ganando. Respeto absoluto. He llegado a la conclusión que este país es de derechas, sin ninguna duda. Les toca gobernar. Solamente pido tres cosas: que garanticen el sistema público sanitario, que pueda estudiar el que valga y no tenga y que no rompan continuamente la hucha de las pensiones. Lo del paro dicen ustedes que va estupendamente. Una última cosa: a todos estos manguis de cualquier sigla, háganles devolver todo lo sustraído, sin prescripciones legales en el tiempo, lleven o no lleven corbata. Es feo ir siempre a por el que tiene nómina y cuatro duros por ahí. Entonces empezaremos a creer que somos todos iguales.
- Multimedia
- Servicios
- Participación
