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A Matteo Renzi le divierte España

El primer ministro italiano, Matteo Renzi, manifestó que “me dan ganas de reír cuando oigo decir que nuestro modelo económico debería ser España, que tiene el doble de tasa de paro que Italia”. Efectivamente, la ingobernable y subdesarrollada Italia tiene una tasa de desempleo del 12%. Afirma que su modelo de política laboral no pasa por la reducción de salarios que practica España, que su objetivo sigue la senda de Alemania, que apoya una política salarial que sirva de catalizador para fomentar la demanda interna. ¿Habrá leído Fátima Báñez estas declaraciones de Renzi y pensará responderle ante lo que es una injerencia en asuntos domésticos? Renzi no debe saber que estamos creciendo a una tasa increíble, que nos hemos constituido en la locomotora de la UE. España está de moda y eso duele a otros países que se limitan a nimiedades como crear empleo, salir de la deflación o controlar la deuda pública. Nosotros tenemos el Toro de la Vega, que es noticia en toda la prensa mundial. Somos una potencia mundial en fútbol, pues la roja solo nos produce éxitos como los de Brasil. En baloncesto, una potencia que se esperaba que compitiera en la final con la de USA en los campeonatos mundiales celebrados aquí. La corrupción de nuestros políticos es castigada y drásticamente reducida por el rigor y seriedad de nuestros jueces. El tono alegre y folclórico de las intervenciones de Montoro en las Cortes, con declaraciones polémicas y divertidas que posteriormente debe rectificar ante unos escasos y adormilados parlamentarios que van a escucharle. Nosotros podemos alardear de que no hemos dado un solo euro a la banca para que no quiebre, tal como garantizó De Guindos. Afirmó que España no fue rescatada por la UE, sino que obtuvo un préstamo de 100.000 millones en unas condiciones privilegiadas, debido a la habilidad de Rajoy en la negociación. Gracias a la política eficaz de nuestras autoridades económicas, nuestra tasa de desempleo desciende vertiginosamente, colocándose ya en un razonable 25%, que se espera que para 2017 se reduzca al 23,9%, según cálculos de los think tanks que asesoran a nuestros altos ejecutivos. La risa de Renzi sobre España ofende nuestro orgullo y estamos a la expectativa de conocer cuál será la respuesta de nuestro ministro de Exteriores, García Margallo, para poner las cosas en su lugar.