El Gobierno de Israel insistió ayer en que sus ataques militares sobre territorio libanés no suponen una violación del alto el fuego alcanzado la semana pasada, sino que responden a supuestos incumplimientos por parte del grupo chií Hizbulá, al que instó a abandonar por completo la zona sur de Líbano.
Así se lo trasladó el ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, a su homólogo francés, Jean-Noel Barrot, cuyo país fue, junto a Estados Unidos, parte fundamental para la consecución del pacto. París denunció la semana pasada violaciones del acuerdo, sin señalar culpables. “He recalcado que Israel no está violando el alto el fuego, sino aplicándolo como respuesta a las violaciones de Hizbulá”, señaló Saar en sus redes sociales, desde donde emplazó a los milicianos de Hizbulá a “moverse al norte” y abandonar posiciones al sur del río Litani.
En este sentido, advirtió de que Israel en ningún caso “volverá a la realidad del 6 de octubre de 2023”, el día previo a que Hamás lanzase unos atentados sin precedentes que desembocaron no sólo en una ofensiva militar sobre la Franja de Gaza sino en la reactivación de la escalada de tensiones en la frontera libanesa.
Barrot, por su parte, insistió en que “todas las partes” deben “respetar” el alto el fuego, según el comunicado difundido por su el Ministerio de Exteriores galo, en el que se incluyen entre los temas tratados con Saar el programa nuclear de Irán, la escalada de las tensiones en Siria o la situación en la Franja de Gaza.
En relación a Gaza, el ministro de Exteriores francés confiaba en que el acuerdo en Líbano “abra el camino a un alto el fuego inmediato” en la Franja, así como a la liberación de todos los rehenes aún retenidos y a la entrada “masiva” de ayuda humanitaria.
Comité técnico
Por su parte, el presidente del Parlamento de Líbano, Nabih Berri, denunció ayer también que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han cometido “una violación flagrante” de los términos del alto el fuego alcanzado con el partido-milicia chií Hizbulá la semana pasada y que estipula el cese de hostilidades a cambio de la retirada de militares e islamistas del sur de Líbano en favor del Ejército regular del país.
Berri, que fue uno de los negociadores del acuerdo, hizo público un comunicado en el que advertía de las “acciones agresivas” llevadas a cabo a lo largo de la última semana por el Ejército de Israel en Líbano, como “la demolición de viviendas en las aldeas fronterizas”, así como incursiones aéreas y terrestres que han dejado “mártires y heridos”, según recogía la cadena Al Manar, afín a Hizbulá.
En este punto, Berri hizo un llamamiento al “comité técnico” integrado por Estados Unidos, Francia, la misión de la ONU en Líbano (FINUL) y los Ejércitos regulares de Israel y Líbano, encargado de supervisar la implementación del acuerdo, para que estudie la situación “en relación con estas violaciones” por parte israelí. “El comité encargado de monitorear la implementación del acuerdo debe cumplir con sus deberes con urgencia y obligar a Israel a detener sus violaciones y retirarse antes que nada de las tierras que ocupa”, destacó el presidente del Parlamento, una autoridad clave en el país en medio del bloqueo político que atraviesa desde hace años por la interinidad del presidente y gobierno.
Berri aseguró que el Ejército de Israel ha violado el acuerdo en más de medio centenar de ocasiones “mientras que Líbano y la resistencia están plenamente comprometidos con lo que prometieron”. Sin embargo, las autoridades israelíes sí que denunciaron varias violaciones del acuerdo por parte de Hizbulá a lo largo de la semana pasada.
Militar libanés muerto
La Dirección General de la Seguridad de Líbano informó que un miembro de las fuerzas de seguridad libanesas murió ayer en un ataque con dron lanzado por Israel en el sur del país. En un nota, aseguró que “en flagrante violación del acuerdo de tregua, un avión no tripulado del enemigo israelí ha atacado con un misil teledirigido a un agente de la Seguridad del Estado, el cabo Mahdi Khreis, de la Dirección Regional de Nabatiye, mientras cumplía con su deber nacional, lo que ha provocado su martirio”.
Ataque chií
Reivindicación de Hizbulá. Hizbulá reivindicó ayer su primer ataque contra posiciones de Israel desde que se anunció el acuerdo de alto el fuego. El ataque golpeó las granjas de Shebaa, una franja de terreno reclamada tanto por Líbano como por Siria, pero que sigue bajo control militar israelí desde 1967. La milicia chií reclamó su autoría, si bien aseguró que el ataque era en realidad una “respuesta de carácter defensivo” a las “repetidas violaciones de la tregua que entró en vigor el 27 de noviembre por parte de Israel”.