Ford se implica a fondo en la batalla eléctrica que sostienen los principales modelos compactos. Su paladín va a ser el Puma, que estrena ahora una derivada Gen-E interesante por su combinación de precio y rendimiento. Coordina un impulsor de 168 CV y una batería de 43 kWh para obtener una autonomía oficial de 376 km que, según el propio fabricante, puede llegar a 523 en recorridos urbanos. El precio de salida fijado en la tarifa oficial (34.884 €) desciende a 31.900 € para las operaciones de compra al contado; los beneficios del Plan Moves III reducen el desembolso a 27.400 €, o a 24.900 si se retira de la circulación un modelo obsoleto. Hay muy pocos rivales por ese dinero.

Los concesionarios de la marca ya ofrecen información y aceptan pedidos del Puma a pilas, cuyas primeras unidades entregarán en mayo. La llegada de esta variante con etiqueta ‘0’ plantea una buena oportunidad de dar el salto a la electromovilidad a las personas que sopesan adquirir un Puma microhibridado. La subvención pública pone el Gen-E al mismo nivel de precio que alguna versión EcoBoost mHEV del propio modelo.

El próximo Puma eléctrico acredita una velocidad punta de 160 km/h y hace gala de un poder para acelerar de 0 a 100 km/h en 8 segundos. Homologa un comedido consumo medio: 13,1 kWh en cien kilómetros. La recarga del 10 al 80% de su batería requiere 23 minutos de conexión a una toma de corriente continua (admite hasta 100 kW).

Una de las particularidades de la versión Gen-E es su capacidad, insospechada para un automóvil de tan solo 4,21 metros de eslora. Con los asientos traseros en su posición natural, ofrece un portaequipaje de 523 litros, volumen superior al que brindan muchos SUV de mayor tamaño. Además habilita un cofre delantero de 43 litros al aprovechar el hueco que depara la ausencia del motor de gasolina.

Como en otros vehículos de la casa, este Puma incrementa el equipamiento de serie en una versión Premium mejor pertrechada (y 2.300 € más cara). El modelo recibe recursos como el Control de Crucero Adaptativo Inteligente, provisto de funciones de centrado de carril, parada y arranque. Este sistema acelera y frena suavemente para propiciar una conducción más natural; puede coordinar su acción con el Asistente de Velocidad Predictiva, que modula el ritmo de crucero en determinadas circunstancias (tramos de curvas, intersecciones y rotondas, o al ingresar y abandonar vías rápidas). La versión Gen-E se completa con pantalla táctil central de 12,0 pulgadas con sistemas de conectividad y entretenimiento SYNC 4 y navegación conectada, panel digital de instrumentos de 12,8 pulgadas, Alexa Built-in integrado, programa de modos de conducción, etc.

El sistema opcional de cámara de visión perimetral de 360º brinda una perspectiva aérea virtual que facilita las maniobras de aparcamiento. Voluntaria en la versión básica y de serie en la definición Premium es la tecnología de faros de matriz led, que utiliza la luz de curvatura dinámica predictiva para monitorizar la carretera y proyectar más luz donde se necesita; ajusta el patrón del haz para mejorar la visión sin deslumbrar. l