Leo Messi no seguirá en el Paris Saint-Germain la próxima temporada. El club desactivará la opción de renovar el contrato del futbolista argentino, que ha sido sancionado dos semanas sin empleo y sueldo por viajar a un compromiso publicitario a Riad sin la autorización del club. Así de contundente se ha mostrado el diario L’Equipe, que asegura que las relaciones entre Messi y el club del Parque de los Príncipes están rotas.

Al parecer, Messi solicitó al club parisino un permiso para desplazarse a la ciudad de Arabia Saudí aprovechando los días de descanso concedidos por la entidad para asistir a un acto promocional promovido por el departamento de Turismo del país saudí. Los días de libranza eran el lunes y el martes. Si bien, la derrota del pasado domingo frente al Lorient (1-3) provocó un profundo malestar en la dirección, que modificó los planes a última hora. La plantilla del PSG era privada de vacaciones y debía ejercitarse el lunes en las instalaciones de entrenamiento, adonde no acudió el rosarino, por lo que el club decidió abrir un expediente disciplinario, decisión adoptada por el propio presidente de la entidad, Nasser Al-Khelaifi.

Hay versiones que sostienen que el anuncio de la obligatoriedad de entrenar se produjo mientras Messi se encontraba ya viajando en avión con destino a Riad. Huelga recordar que el compromiso publicitario del campeón del mundo era con Arabia Saudí, país que mantiene unas tensas relaciones con Catar, que a su vez es el principal accionista del PSG.

Estos hechos han modificado el plan del club parisino, que venía manteniendo contactos con el jugador para ampliar la relación contractual que finaliza el próximo 30 de junio pero que estaba sujeta a una opción de ampliación en caso de que ambas partes estuvieran de acuerdo. El reciente título de la Copa del Mundo obtenido por Messi había fortalecido el interés por la continuidad del jugador, pero ahora todo ha cambiado.

La segunda temporada de Messi en el PSG no venía siendo apacible. A sus 35 años, pese a los 20 goles y 19 asistencias que ha firmado en 37 partidos esta temporada, las eliminaciones del PSG en la Champions League a manos del Bayern Múnich en los octavos de final (derrotas por 2-0 y 3-1) y en la Copa de Francia enfurecieron a la afición, que comenzó a abuchear a Messi en su propio estadio. 

De hecho, hoy alrededor de 300 personas del colectivo hinchas CUP exigieron la dimisión de la cúpula de PSG a las puertas de sede del club, donde se pudieron escuchar protestas como "¡Neymar, vete a paseo!", "estamos hartos de mercenarios: ¡echad a Messi!" y "sobre todo hay que echar a Al-Khelaifi.

Además, la supuesta superioridad del PSG en la Ligue 1 no se está viendo reflejada con resultados. A falta de cinco jornada para la conclusión, de las cuales Messi se perderá a priori dos, el PSG es líder con solo 5 puntos de ventaja sobre el Marsella tras perder tres de sus últimos cuatro compromisos en el Parque de los Príncipes. Esas desavenencias producidas por los resultados y la sanción actual son las razones que harán que el argentino abandone el club.

En la frontera de Messi aparece la oportunidad de regresar al Barcelona después de que dirigentes del club culé mostrarán interés en el retorno del jugador. Si bien, se antoja como una operación compleja debido a la situación económica de la entidad catalana. Figuran además otros posibles destinos como Arabia Saudí, país que ya reclutó a Cristiano Ronaldo para un retiro dorado. Según han publicado diversos medios, el Al-Hilal, el club más laureado del país saudí, habría ofrecido 400 millones de euros por temporada al rosarino.