“Ha sido un punto que hay que valorarlo como bueno. Toca seguir y pensar en el partido ante el Alcoyano”. Haritz Mujika, técnico del Amorebieta, es consciente de que sumar siempre es positivo, sobre todo cuando la liga entra en su tramo decisivo y donde todos los equipos se juegan algo importante. Por ello, el preparador del conjunto azul se mostró satisfecho por el empate firmado por su equipo frente al Intercity en el estadio Antonio Solana alicantino, un campo en el que es “difícil de combinar, por ello hemos jugado directos, a las caídas, a estar en el área rival”, y después de un encuentro en el que “hemos preferido minimizar riesgos, el equipo defensivamente ha estado muy bien y, salvo en córners o en una jugada aislada, no nos han creado ocasiones”.

Un punto que le permite al Amorebieta mantener activado su contador, ya que, a la espera de ponerse al día en el partido del 12 de abril en Alicante ante La Nucía y aplazado en su día por el fallecimiento del directivo zornotzarra Aitor Larruzea, se consolida en puestos de play-off y a solo cuatro puntos de distancia del Eldense, líder y que en doce días comparecerá en Urritxe.

El colectivo dirigido por Haritz Mujika suma y sigue. Son ya nueve las jornadas consecutivas que encadena sin hincar la rodilla, un racha extraordinaria en la que ha hecho caja, y con el añadido de que no pierde lejos de su terreno desde el pasado 23 de octubre, cinco meses, cuando sucumbió en Castalia por la mínima frente al Castellón, segundo clasificado y que emerge como un rival directísimo. Des entonces se ha mostrado como un equipo rocoso y difícil de batir cuando compite como visitante, ya que enlaza ocho viajes sin perder, con un saldo de cinco empates y tres victorias, 14 puntos, y con la plusvalía de recibir solo cinco goles, al mismo tiempo que en la mitad de ellos ha dejado su puerta a cero, estadística que retrata el poderío defensivo de un equipo que ha ido a más con el paso de las jornadas.

Venimos de abajo (en referencia a su delicada situación en la tabla precisamente tras la mencionada derrota en Castalia), poco a poco hemos ido confiando en nuestro trabajo, en la calidad que tienen estos jugadores. Estamos contentos con el trabajo que están haciendo en el día a día, trabajan como animales”, sentencia su entrenador, sabedor de que solo cuatro de los diez encuentros que le restan a su colectivo los jugará en Urritxe.