Síguenos en redes sociales:

Bizkaia Green: Ciudades por y para los ciudadanos

Sostenibilidad urbana: imperativo global

DEIA organiza una jornada en la que se reunirán entidades y empresas comprometidas con un futuro mejor y más sostenible para Bizkaia. Un espacio de reflexión acerca de cómo serán las ciudades por y para los ciudadanos

Sostenibilidad urbana: imperativo globalBorja Guerrero

En la actualidad, las ciudades representan el corazón de la vida moderna y albergan a más de la mitad de la población mundial; por lo que generan aproximadamente el 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero, según datos de la ONU. Sin duda un gran crecimiento urbano que se ha vivido en las últimas décadas y que ha traído consigo desafíos significativos como son la congestión, la contaminación, la escasez de recursos o la desigualdad social entre otros muchos. Sin embargo, también ofrece una oportunidad única para repensar y transformar las urbes en espacios sostenibles, inclusivos y resilientes, poniendo a los ciudadanos en el centro de su desarrollo y donde todo se diseñe por y para los ciudadanos que residen en ellas.

En este sentido, Bizkaia se mantiene firme en su compromiso de ser un referente en sostenibilidad a nivel global. Solo hay que ver cómo desde hace años, nuestra industria está dando pasos hacia una transición verde, una apuesta por la economía circular y una descarbonización que abre nuevas oportunidades de negocio.

En definitiva, un cambio a una estrategia más verde y a una Bizkaia más green como es el lema de la jornada organizada por DEIA para el próximo 8 de julio. Un espacio de reflexión que reunirá a representantes de administraciones, instituciones y empresas del sector en Euskadi donde se intercambiarán ideas acerca de cómo será el futuro de nuestras ciudades, qué papel jugará la movilidad, la arquitectura urbana y/o la forma de relacionarnos con la ciudad, cuánto se ha avanzado en sostenibilidad o qué se está haciendo desde las empresas para acercarnos a ese objetivo de la neutralidad climática. 

En otras palabras, un interesante punto de reunión para hablar de sostenibilidad y poner el foco en la ciudadanía y en las iniciativas que pueden decidir el futuro de Bizkaia. La cita es el próximo martes a las 10.00 horas en el Palacio Euskalduna con la participación de Asier Abaunza, concejal de planificación urbana, espacio público y proyectos estratégicos del Ayuntamiento de Bilbao; Amaia del Campo, alcaldesa de Barakaldo y Laura Gutiérrez, técnica de proyectos en acción climática de Ihobe como integrantes de una primera mesa redonda moderada por Olga Martín, directora general de Aclima. Tras ella será el turno del periodista Txema Gutiérrez que hará lo mismo con los participantes en la segunda mesa con Janire Bijueska, responsable del Gabinete de Apoyo a Presidencia-Gerencia en Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia; Mónica Oviedo, responsable de Desarrollo Sostenible y Agenda 2030 de Iberdrola; Koldo Nieto, delegado de la zona norte en Valoriza y Erik Sandonis Martín, responsable de Oficina Técnica e I+D+i en Lezama Demoliciones. Como cierre de oro contaremos con la ponencia de Ibon Areso, arquitecto y alcalde de Bilbao entre los años 2014 y 2015.

Vecinos en El Arenal

Sin sostenibilidad no hay desarrollo local

El concepto de ciudad pasa irremediablemente por pensar en un primer plano en las personas que residen y habitan en ella. De esta manera, las ciudades diseñadas pensando en las personas son aquellas en las que se prioriza la calidad de vida, la accesibilidad, la participación ciudadana y el bienestar social. Esto implica crear entornos donde las calles sean seguras y amigables para peatones y ciclistas, donde los servicios públicos sean eficientes y accesibles, y donde la participación activa de los residentes sea un pilar fundamental en la toma de decisiones.

Además, una ciudad orientada a sus ciudadanos fomenta la equidad social, trabaja en pro de un desarrollo económico y urbano y local y pone de manifiesto la planificación participativa en la que los residentes contribuyen a definir las prioridades y proyectos urbanos, fortalece el sentido de pertenencia y responsabilidad colectiva.

Aparte, el uso de tecnologías digitales y plataformas abiertas permite una comunicación más efectiva entre las autoridades y la comunidad, facilitando la gestión transparente y adaptada a las necesidades reales de sus habitantes. Y todo ello sin perder de vista el concepto de sostenibilidad en las ciudades, que implica gestionar de manera responsable los recursos, reducir el impacto ambiental y promover un desarrollo económico y social equilibrado. Acciones que se antojan cuando menos necesarias ante una emergencia climática que demanda acciones concretas para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, mejorar la eficiencia energética y proteger los ecosistemas urbanos y periurbanos.

El compromiso con la sostenibilidad también implica considerar la economía circular, el ecodiseño y otros enfoques innovadores que redefinen la forma en que construimos, consumimos y vivimos en las ciudades del presente...pero sobre todo de un futuro no tan lejano. La clave en este sentido pasa por armonizar estos conceptos en una visión que priorice el bienestar de esas personas. Ciudades del futuro por y para los ciudadanos.   

Ciudades sostenibles y humanas

La transformación de las ciudades hacia modelos más sostenibles, ecológicos y centrados en sus ciudadanos requiere una visión integral y colaborativa. Es fundamental que las administraciones, el sector privado, la sociedad civil y los propios habitantes trabajen en conjunto para diseñar soluciones innovadoras y adaptadas a sus contextos específicos. Y es que fomentar la participación ciudadana en la planificación y gestión urbana garantiza que las decisiones respondan a las necesidades reales y que los proyectos tengan un impacto positivo duradero de cara al futuro que está por venir; un futuro cambiante y a un ritmo que no para. 

El urbanismo del siglo XXI debe ser un espacio donde la sostenibilidad, el ecodiseño y la economía circular no sean solo conceptos teóricos, sino principios rectores que guíen ese avance conjunto. Así, las ciudades tienen el potencial de convertirse en motores de cambio hacia un futuro más sostenible, desarrollado, competitivo y humano. Una transformación urbana que traerá consigo un mejor desarrollo económico, empleos más dignos, una mejor calidad de vida para sus habitantes y una protección del planeta.